Martha Gallegos y Beatriz López de Muñoz, damnificadas por las abras en las colonias César G. Meraz, Emiliano Zapata y Villa de las Flores, muestran el cheque por mil pesos donado por el Ayuntamiento para apoyo.
Un total de 34 familias de la zona de riesgo debido a los hundimientos que afectan a las colonias César G. Meraz, Emiliano Zapata y Villa de las Flores, ayer recibieron apoyo económico aprobado por el Cabildo a propuesta del presidente, Carlos Aguilera. Cheques de mil y de 500 pesos fueron recogidos por los afectados.
El responsable de las finanzas de Lerdo, Alfredo Juárez Baeza, dijo que los estudios socioeconómicos realizados a las familias solicitantes, han arrojado como necesario apoyar a las 34 familias.
Por dicho motivo, les ofrecieron ayer una ayuda para que sufraguen su gasto en la renta de alguna vivienda afuera del sector afectado o para cubrir alguna necesidad derivada de su situación actual.
El Gobierno Municipal en base a los estudios socio-económicos que se realizaron previamente, determinó ofrecer este apoyo el cual fue solicitado por ellos mismos. “El Cabildo tomó en cuenta su petición y finalmente ahora se concreta”.
El tesorero refirió que el apoyo está sujeto a la capacidad financiera del Municipio, toda vez que se está soportando con recursos propios, sin participación del Gobierno Estatal o Federal. Tampoco hay un techo financiero para tal fin.
Por lo anterior, Juárez Baeza afirmó que se trata de un esfuerzo de la actual Administración “y se ampliará y mantendrá vigente hasta donde la capacidad financiera del Municipio lo permita”.
LO AGRADECEN
Martha Gallegos de la colonia César G. Meraz y Beatriz López de Muñoz, ayer acudieron a las oficinas de la Tesorería Municipal para recibir cheques por la cantidad de mil pesos para cada una.
Acompañadas por los miembros de sus familias, agradecieron el apoyo otorgado por las autoridades ante la situación que viven, “el dinero que nos dieron es poco para lo que estamos viviendo, pues no sólo es la renta sino ahora es el pago de los servicios de las dos viviendas, la que dejamos por las abras y la que ocupamos en arrendamiento”.
Las amas de casa platicaron de los problemas que están enfrentando y que sin duda, han trastocado su economía y tranquilidad, “porque tenemos mucha incertidumbre de lo que pasará, pues estamos hablando de un patrimonio formado durante muchos años y no es fácil volver a empezar”, expresó Beatriz.