Una forma de evitar consumir chatarra es pedir una ración mayor de verdura en el plato, ya que llenará sin aportar calorías.
Es importante recordar que alimentarse bien es primordial para rendir adecuadamente durante el día.
Son pocas las personas que trabajan o estudian y pueden volver a casa a la hora de las comidas. Hay quienes salen disparados en las mañanas con el “estómago vacío” o personas que se pasan “el día en blanco” porque no tienen tiempo de comer, lo cual afecta negativamente su salud.
El Consejo Europeo de información sobre Alimentos nos dice que cuando se come fuera de casa hay que pensar en el tamaño de las raciones: Cuanto mayor sean, más fácil resulta comer de más.
Una forma de evitar consumir chatarra es pedir una ración mayor de verdura en el plato, ya que llenará sin aportar calorías.
Acostúmbrese a notar cuando ha comido suficiente y a dejar lo que no quiera, o no pida entrada (primer plato) ni postre. Si va a comer con amigos, ¿por qué no compartir? De esta forma, podrá saborear muchos platos diferentes.
La carne roja, de vaca o borrego, es fuente de hierro, al igual que el pato, pero pueden ser muy grasosas; es mejor elegir cortes finos, magros y pedirlos a la plancha o asados.
El cerdo se cría para que su carne sea magra, y el pollo y el pavo son carnes poco grasas.
Especial del menú
El pescado es una buena opción, puede alternar el pescado azul (salmón, sardinas, atún), rico en ácidos grasos omega-3, con el blanco. A mucha gente le resulta difícil cocinar pescado, por lo tanto, hay que aprovechar cuando se va al restaurante.
Lo ideal es que esté cocinado a la plancha o al horno.
Otros alimentos como arroz, pasta o papas, son los que más satisfacen. El arroz y papas cocidos son mejores que fritos. Puede untar mantequilla o margarina al pan, aunque con moderación, la segunda tiene una composición más saludable que la primera, pero el mismo número de calorías.
Algo que se debe hacer siempre: Pruebe la comida antes de añadir sal u otros condimentos, el cocinero ya habrá aderezado los platos. Pida las salsas por separado; así podrá tomar sólo la cantidad que desee.
Para las ensaladas, elija aceite de oliva, colza o nuez, ya que son ricos en ácidos grasos mono y poliinsaturados benéficos, en lugar de mayonesa y otros aderezos cremosos.
Otras opciones
Las legumbres son bienvenidas: garbanzos, frijoles y lentejas suelen ser ingredientes de sopas y caldos tradicionales que son un excelente componente de la dieta porque aportan fibra y “nos hacen sentirnos llenos más tiempo, porque se digieren lentamente”.
Sobre huevos y productos lácteos como el queso, leche y yogurt, los expertos advierten que son muy nutritivos, pero es mejor consumirlos en pequeñas cantidades.
Coma queso con moderación, y tome sólo un huevo, en lugar de dos, para desayunar y no muy a menudo. Si le preocupa su ingesta de grasa, puede elegir productos lácteos descremados.