Cultura Cultura columnas editorial

Aprenden la magia de la expresión


Lucila Olalde imparte clases como pantomima y cambio de personaje a los alumnos.

Lucila Olalde imparte clases como pantomima y cambio de personaje a los alumnos.

Niria Ramos Marín El Siglo de Torreón

La Compañía de Teatro para Sordos sesiona para tratar de llevar a escena su primera obra en el mes de marzo.

El teatro tiene múltiples maneras de trabajarse, pero hay una en particular que por primera vez se experimenta no solamente en Torreón, sino en todo el Estado, esto gracias a la creación de la primera Compañía de Teatro de Sordos la cual ya sesiona.

En esta capacitación, maestros especialistas del grupo Seña y Verbo, precursor del proyecto, visitan el Teatro Nazas, sede de la compañía, para compartir sus conocimientos y hacer crecer a sus integrantes como actores y como sordos completamente integrados a la sociedad a través del trabajo artístico.

Para la más reciente capacitación, la maestra Lucila Olalde, representante del grupo Seña y Verbo, visitó el Nazas y trabajó con este grupo de alrededor de 15 personas que también sesionan con un intérprete y Eloy Delgadillo como asistente de dirección en todo este proceso.

Los jóvenes llegan al teatro con ropa de trabajo, es decir calzado cómodo, ropa flexible y ligera, y lo más importante: con toda la disposición de crear algo nuevo en sus vidas y las de los demás a partir del acto dramático.

Al igual que el trabajo cotidiano del actor, el calentamiento es algo básico para iniciar, luego se propicia la unión del grupo y la confianza y unión con su maestro, pero conforme el proceso avanza va cambiando y toma características propias, diferentes a todo lo antes visto en el trabajo actoral, y es que explica la maestra Lucila a través de su intérprete que la dinámica no puede ser igual pero sí muy enriquecedora: “Son muy diferentes, porque por ejemplo un actor usa la voz, usa el cuerpo, la concentración, se pone a leer, a trabajar cuáles son los sentimientos; pero en el caso de los sordos tiene que ver todavía mucho más la expresión del cuerpo, el sentimiento y el uso de la expresión facial, esto es importantísimo, el lenguaje de señas es muy diferente en el teatro a en el lenguaje de sordos dentro de su comunidad, entonces hay que aprender cómo hacerlo en el teatro, no se puede hacer lenguaje de señas porque entonces el público no lo va a entender, entonces tiene que ser una especie de ‘pantomima de señas’ para que lo entiendan y les llegue al corazón y que digan ‘sí, eso sí lo puedo entender’. Entonces trabajamos la pantomima de señas, expresión facial, cambio de personajes, el ‘zoom’ -que es acercarte o alejarte de la acción al mismo tiempo-, de hecho siempre estamos cambiando de estilos que se unen en una misma obra”.

Así, los alumnos forman una media luna y al frente la maestra les indica cuál será el ejercicio a realizar, primero imitan animales y el grupo tiene que adivinar de qué animal se trata, luego sigue la dinámica de cambio de personaje en la cual se les asignan tareas individuales para mostrarlas al grupo y la sesión continúa con expresión corporal y facial entre las risas y la timidez inicial de los participantes, que después ya están como peces en el agua y logran una dinámica muy interesante y divertida.

ANTECEDENTES

Lucila Olalde forma parte de Seña y Verbo desde hace 15 años: “El grupo de teatro es de sordos pero es bilingüe, comenzamos siendo primero tres actores, el director es Alberto Lomnitz -que tiene muchísima experiencia-, después a los cuatro meses con oyentes y con sordos aprendimos un poco más, después nos fuimos a Nueva York a una escuela de teatro profesional para aprender todavía más técnicas, de muchos más años y de muchas personas que estuvieron ahí”.

“Regresamos, seguimos avanzando y empezamos con la obra llamada La Fiesta del Silencio. Y tenemos 11 obras diferentes con las que hemos ido de gira a muchísimos lugares del país y de Estados Unidos”.

“Ahora estamos presentando al nuevo grupo de Torreón, viajamos, vimos, y queremos que en toda la República Mexicana haya más grupos de teatro para sordos ¿por qué no?, queremos animarlos, orientarlos, hacerles un llamado porque por ejemplo el de Coahuila sería el segundo grupo”.

Olalde regresa a la Ciudad de México, pero volverá en unos meses para continuar la capacitación ya que para finales de marzo en 2009 se planea llevar a escena el primer montaje de la compañía “Pero primero hay que capacitarlos y por eso están aquí los de Seña y Verbo”, explicó Eloy Delgadillo, asistente de dirección de la Compañía de Teatro Para Sordos de Torreón.

Desde el oyente

Eloy Delgadillo, asistente de dirección de la Compañía de Teatro para Sordos de Torreón y actor lagunero, dice que ésta es una experiencia completamente nueva para él, así como una labor muy difícil pero muy interesante: “Para mí fue bastante extraño y difícil entrar a un mundo que no conozco, porque yo no sé el lenguaje de señas, pero Jorge Méndez, el director de la compañía me invitó, vine a trabajar la corporalidad de los muchachos y es un grupo muy interesante, yo les enseño lo que sé pero estoy aprendiendo mucho más. Como actor es una manera muy distinta de trabajar, y te das cuenta de que cuando elaboras un personaje muy minucioso los sordos tienen esta capacidad de llevarte detalle por detalle, es muy padre este trabajo”.

Leer más de Cultura

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Cultura

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana


Lucila Olalde imparte clases como pantomima y cambio de personaje a los alumnos.

Clasificados

ID: 384372

elsiglo.mx