Timbiriche dio el último concierto de su reencuentro. (Jam Media)
El Universal
MÉXICO, DF.- Aunque un día antes prometieron que habría “grandes sorpresas” durante su último concierto como agrupación, éstas nunca llegaron o quizá sí, pero muy “a cuenta gotas”. Sin embargo, eso pareció no importar al público, que disfrutó de una súper fiesta con la banda Timbiriche.
Después de un retraso de una hora, como dirían los timbirichos “la fiesta comenzó” en el escenario del Foro Sol, que prácticamente lució lleno.
Niños, adolescentes y adultos se olvidaron del caos vial por las reparaciones en Circuito Interior de la ciudad de México, para cantar, bailar y brincar durante el concierto que duró dos horas con 20 minutos.
Quizá no faltó quien esperó algo diferente a lo que Benny, Mariana, Eric, Sasha, Diego y Alix habían presentado durante un año de reencuentro, ya que prácticamente mostraron la misma producción.
Pero eso parece que tampoco importó a la concurrencia, al menos no para aquellos que los veían por vez primera, es más, quizá ninguno de los presentes exigió nada más que ver a sus ídolos, quienes con su voz dieron vida a canciones como Muriendo Lento, Besos de Ceniza, Princesa Tibetana, Tú y yo Somos uno Mismo y Corro, Vuelo y me Acelero.
Sobre el escenario aparecieron unos cuantos bailarines, igual que Cocorito.
Además, para esta ocasión, aquella pirotécnica que el público prácticamente veía en video (durante sus presentaciones en el Auditorio Nacional) nuevamente cobró vida.
“Muy buenas noches. Lo único que puedo decir es gracias, porque sin ustedes no existiría Timbiriche”, expresó Diego quien se escuchaba nervioso; incluso se mofó de esta situación por cómo se le trababa la lengua.
Superan deficiencia de sonido
Los primeros minutos de la presentación parecieron difíciles ante un sonido carente de calidad. Un sector del público silbó en protesta. No obstante, el sexteto salió avante y, al ritmo del popurrí de Vaselina, pusieron a bailar a todos. “¡Qué energía! ¡Qué rico! Es una bendición tenerlos aquí”, expresó Benny, quien en muchas canciones tocó la guitarra al igual que Diego, mientras Eric hizo lo propio con el bajo.
LLORAN ÚLTIMO ‘ADIÓS’
Inevitable fue el momento en que sobre los rostros de los cantantes rodaron lágrimas. Diego fue el más vulnerable entre sus colegas, pero Alix no sé quedó atrás.
“Como podrán ver, es muy difícil para nosotros poder hablar esta noche.
“Si pudiera, me bajaría a darle un beso a cada uno de ustedes”, mencionó.
Con uno de sus temas más representativos, “México”, la banda Timbiriche concluyó su presentación.
Mientras, el cielo se tornaba verde, blanco y rojo debido a las chispas que estallaban del escenario al igual que los papelitos tricolores.
Atrás del sexteto lucía el Escudo Nacional.
Como lo cantaron minutos antes con el tema “Juntos”, estos timbirichos “... llegamos para nunca irnos...”.
Como ya se ha han manifestado en otras ocasiones, mientras alguien de entre su numeroso público se acuerde de esta gran banda, estos legendarios cantantes permanecerán vivos.
