Policías cerraron con malla el lugar donde se construirá el estacionamiento de la Alianza. (Fotografía de Ángel Padilla)
Arranca la primera etapa de rescate del sector Alianza.
Las obras de rescate del sector Alianza iniciaron ayer en medio de un operativo policiaco en el sitio conocido como “el pozo” para resguardar la llegada de cuadrillas que construirán un estacionamiento sobre el lugar que desde hace años estaba tomado por posesionarios.
El operativo con 15 agentes armados fue necesario debido a que durante la madrugada los posesionarios del lugar fueron desalojados y se temía que regresaran por la mañana cuando comenzaron a entrar camiones materialistas.
Los policías forcejearon con el abogado Fernando Rangel de León, que acudió en representación de las personas desalojadas del terreno, que es propiedad del Municipio.
“El pozo” será sede de un estacionamiento de tres niveles para 200 vehículos, con un costo de 30 millones de pesos aportados por el Estado y el Municipio y que es la primera etapa en el proyecto de rescate del sector.
El forcejeo ocurrió cuando varios camiones de materialistas se presentaron a cargar tierra en el lugar.
Tres personas que se dicen posesionarios de esos terrenos desde hace 12 años se presentaron a sacar objetos que tenían en el interior y convocaron a medios de comunicación, así como al notario José Ortiz Barroso y al abogado Fernando Rangel, con el fin de que los defendieran.
Carlos Gildardo Mejía Aldaba, Juan Pedro Mejía Aldaba y Blanca Aldaba, aseguraron que desde hace 12 años son trabajadores en el lugar, que se utiliza como estacionamiento.
“No nos oponemos a la obra que quiere hacer el Municipio, pero era un lugar que ya estábamos trabajando para nosotros”, dijo Mejía. Los posesionarios pretenden una indemnización de parte de las autoridades ya que aseguran tener derechos creados desde hace 12 años.
Reconocen que el terreno es del Municipio y ellos sólo lo manejaban como estacionamiento.
Rodolfo Walss, secretario del Ayuntamiento, dijo que no hay oposición de locatarios de la Alianza para la obra y que si en el caso de los posesionarios “hay afectación comprobable, nosotros estamos abiertos al diálogo”.
Se trata de una obra que estará a cargo de la constructora Coplasa y es uno de los tres proyectos que tiene el Municipio para rescatar el Poniente de la ciudad, que son financiados con 57 millones de pesos por el Impuesto Sobre Nóminas. Los otros dos proyectos son el Paseo Alianza y la Plaza Comercial Harinera a donde se reubicaron a los “fierreros” de la calle Viesca.
El lugar fue cerrado desde ayer con malla para evitar la entrada de personas ajenas a la constructora y con el propósito de que los trabajos se desarrollen con seguridad.
Finalmente, los posesionarios sacaron sus pertenencias del terreno a bordo de viejos triciclos. Pero luego del forcejeo, Rangel acusó un acto de abuso policiaco luego de que fue sujetado y sometido por ocho policías.
El abogado dijo que los agentes le impidieron hacer su trabajo. El oficial Roberto Lira a cargo del operativo, negó la prepotencia y dijo que “nosotros no lo sacamos al señor, únicamente no permitimos que entrara”.