La visita de los siete templos o siete monumentos, es una tradición católica que los laguneros conservan y practican con fe.
Dentro de la tradición católica realizar la visita a los siete templos o siete monumentos el Jueves Santo, es todo un ritual, en el que los fieles visitan representaciones donde está expuesto el Cuerpo de Cristo, para acompañar simbólicamente a Jesús en sus momentos de Pasión, Juicio y Sentencia de muerte, capítulos de los que las personas tienen idea a través del arte.
La presencia del arte en los templos religiosos es tan antigua como los mismos templos, todas las culturas han manifestado y representado sus dioses y creencia mediante el arte, y el cristianismo no es la excepción, desde pintura, escultura, música e incluso el cine se ha manifestado en todas las formas posibles inspirado en la fe del hombre y la Pasión de Cristo.
Carlos Correa es un arquitecto lagunero, de 32 años y miembro de una numerosa familia católica, como las miles que anoche acudieron a visitar los siete templos. Él comenta que a pesar de no ser católico, todos los años y más aún los jueves santos acude con su familia a visitar los siete templos en Torreón, “me gusta la convivencia familiar y observar la romería en torno a esta manifestación de fe por parte de la comunidad cristiana, a mí en lo particular lo que más me atrae de las iglesias es apreciar todo el entorno arquitectónico que hace a estos templos una maravilla digna de contemplación”.
Muchas son las opiniones de los fieles que siguiendo la costumbre católica visitaron los siete templos este Jueves Santo acompañados de su familia, desde quienes lo hacen con el fin de inculcar los valores y principios católicos, en los hijos y el seno familiar, hasta quienes sin ser católicos practicantes, acompañaron a sus seres amados por este recorrido simbólico de la muerte de Jesús, o en el más alejado de los casos quien lo hizo por el goce de ver la fiesta y la convivencia ciudadana a todo lo que da.
El caso Juan Manuel de Lara es similar, aun cuando reconoce ser católico no practicante, comenta que esta semana es la única del año en la que asiste a las iglesias, el resto del tiempo lo hace de manera muy esporádica, es decir cuando hay una boda, un velorio o una misa no programada, pero confiesa que espera esta época del año para visitar los siete templos, y contemplar las imágenes de los santos, la Virgen y Jesús, por que según él, si en un lugar se reúnen las disciplinas artísticas, es en la iglesia.
Música como la compuesta por Mozart, Guillaume de Machaut, Vivaldi, Rosini o Francis Poulenc, que es completamente eclesiástica y basada en capítulos exactos de la Pasión de Cristo, se escuchaba como fondo en los templos laguneros muy visitados este jueves, al igual que las imágenes que representan la acción católica que por estos días se celebra, basados en grandes obras como las de Jacopo de la Quercia, Goya, Arce y Cevallos, Matisse o Dónatelo, se pudieron percibir en iglesias laguneras como la catedral del Carmen o la Capilla de San Miguel de Allende.
De esta manera muchas personas acudieron anoche a visitar los siete templos en La Comarca Lagunera, dentro de un recorrido de fe en el que también se encuentran presentes manifestaciones artísticas como la música y las artes visuales, que de la mano de la tradición católica de la semana mayor hicieron que miles de familias caminaran por las calles de la ciudad en busca de sus siete monumentos.
Acto de devoción
Gerardo Molina, sacerdote que por estas fechas se encuentra en la ciudad ofreciendo clases en el Seminario Mayor de Torreón, explicó acerca de la tradición católica: “después de la Última Cena, hubo siete momentos importantes de traslados de un lugar a otro, por los que tuvo que pasar Jesús antes de morir en la Cruz.
El verdadero sentido de éstas visitas se desprende desde la lectura del Evangelio, en que se nos narra que todos los discípulos lo abandonaron y dejaron sólo (San Marcos 14, 50). Por ello nosotros, que sentimos especial devoción a Jesús Sacramentado, tratamos de acompañarlo el Jueves Santo en éstos momentos que vivió Nuestro Salvador.
