En casi una hora, dos farmacias de la misma cadena comercial fueron asaltadas por sujetos armados que amagaron al personal femenino y se llevaron dinero en efectivo. En uno de los casos una trabajadora fue víctima de una fuerte crisis nerviosa.
En la farmacia Klin’s ubicada en la avenida Allende 803 oriente de la ciudad, tres sujetos llegaron al lugar y uno de ellos armado con una pistola tipo escuadra amagó a la cajera ordenando que le entregaran el dinero de las tres cajas registradoras. El asalto con violencia fue a las 21:40 horas y acudieron al llamado de auxilio los agentes de la patrulla 35707, que recabaron una breve descripción de los asaltantes.
Al indagar en el lugar, los policías preventivos detectaron que hay circuito cerrado de seguridad y al solicitar el acceso para ver las imágenes del video, la encargada se percató de que las cámaras estaban apagadas y no había tal grabación. Casi una hora antes de este asalto, se presentó un delito similar en otra farmacia de la misma cadena comercial, ubicada en la avenida Juárez y calle Xochimilco.
Aquí la cajera fue víctima de una crisis nerviosa que ameritó la presencia de la Cruz Roja para tratar de tranquilizarla y sólo pudo decir que el asalto lo cometieron dos sujetos, sin lograr proporcionar mayores datos.
Sacan aire, logran robo
Con el truco de “la llanta baja”, dos maleantes lograron despojar de 60 mil pesos a un cliente de un banco que acababa de cambiar un cheque, informó la guardia de la Policía Ministerial.
El afectado dijo a los agentes que acudió al banco ubicado en bulevar Independencia y Quebec donde canjeó 60 mil pesos que llevaba en un maletín y al avanzar algunas cuadras se dio cuenta que tenía una llanta ponchada.
El conductor descendió del vehículo y se disponía a reemplazar la llanta cuando llegó un joven de entre 23 y 25 años de edad, tez blanca, y cabello erizo que se aproximó al vehículo pero no le dio mayor importancia. Al incorporarse el dueño del dinero se dio cuenta que el joven se retiraba del lugar para abordar un auto VW Jetta color arena, que era conducido por otro sujeto, retirándose del lugar con rumbo desconocido.
En la Dirección de Seguridad Pública Municipal se informó que en este truco utilizado por los ladrones, cuando ya la llanta no tiene aire, se acerca una tercera persona para ofrecerse a ayudar con el reemplazo y en el peor de los casos utiliza la violencia para cometer el delito, por lo que se recomienda a la ciudadanía estar alerta.