El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, afirmó hoy que se encontrarán y castigarán a los responsables de la explosión que se registró esta madrugada en Times Square y que nadie 'intimidará' a los neoyorquinos.
'Encontraremos a los culpables y los llevaremos ante la justicia. No nos van a intimidar, no toleraremos este tipo de ataques', enfatizó Bloomberg.
'Es claro que el artefacto iba dirigido específicamente contra el centro de reclutamiento' militar, dijo Bloomberg en rueda de prensa a escasos metros de donde tuvo lugar la explosión.
A las 03:45 hora local (08:45 GMT) un pequeño explosivo de fabricación casera estalló a las puertas del centro de reclutamiento militar que se ubica en una isleta entre la Séptima Avenida y Broadway, a la altura de la calle 43.
No se reportaron heridos ni graves daños materiales, salvo algunos cristales rotos y nerviosismo entre los cientos de turistas alojados en los hoteles de la zona.
La policía respondió a la emergencia en apenas minutos, acordonando la zona e interrumpiendo el tráfico durante unas dos horas para asegurarse que no había ningún otro explosivo.
A primeras horas de la mañana, la normalidad y la calma ya habían regresado a la ciudad, con el tráfico y el servicio de metro fluyendo como cualquier otro día.
Bloomberg lamentó que el ataque tuviera como objetivo un símbolo del ejército y subrayó la valiosa labor que realizan los soldados estadunidenses en todo el mundo.
'Vivimos en un mundo amenazado', apuntó, tras asegurar que 'Nueva York es una ciudad segura'.
El alcalde certificó que la normalidad había vuelto a la ciudad y proclamó que 'Nueva York está de nuevo en marcha'.
El jefe del Departamento de Policía, Raymond Kelly, señaló por su parte que los investigadores siguen recogiendo pruebas en la escena del ataque.
Explicó que el artefacto consistió en un explosivo 'poco sofisticado' contenido en una pequeña caja de munición ñde metal y color verde-, como las que se pueden comprar en tiendas de material de la armada.
La policía revisa también las grabaciones de las decenas de videocámaras instaladas en los alrededores de la zona, repleta de hoteles y comercios.
Un testigo afirmó que poco antes de la explosión vio a un hombre en bicicleta con una mochila 'que se comportaba de forma sospechosa'.
Algunas hipótesis apuntan a que lo sucedido podría tener que ver con la presencia de tropas estadounidenses en Irak. En los últimos años, esta oficina del ejército ha sido escenario de protestas contra la guerra en el país árabe, como ocurrió en octubre de 2005.
El centro fue renovado en 1999 para que fuera a tono con el resto de Times Square, adornándolo con un luminoso de neón.
Durante medio siglo, este centro fijó récords de reclutamiento, siendo uno de los más activos. En la actualidad, ha quedado más como una rémora del pasado.
A las 08:30 hora local, en plena hora punta, la normalidad y la calma eran totales en la ciudad. Ello debido a que la explosión fue leve y que se produjo de madrugada. Cuando la ciudad se despertó y se puso en marcha la situación ya estaba controlada.
Tras la explosión, miles de turistas que se alojan en las decenas de hoteles ubicados en Times Square salieron de sus habitaciones presos del temor.
Algunos huéspedes del Marriot Marquis, a una cuadra del sitio de la explosión, narraron que escucharon un 'gran estruendo' y sintieron cómo vibraron los cristales de ventanas.
