El presidente de Ecuador, Rafael Correa (d), da la mano al nuevo jefe de Personal de las Fuerzas Armadas de Ecuador, general Fabián Varela (i). Los observa el ministro de Defensa, Javier Ponce, durante una ceremonia en el Palacio de Gobierno en Quito. (AP)
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, posesionó ayer en sus cargos a los nuevos integrantes de la cúpula militar, en otro episodio de la crisis desatada por el bombardeo colombiano a un campamento de las FARC en territorio ecuatoriano.
Correa, quien cuestionó la labor de los organismos de Inteligencia de las Fuerzas Armadas, nombró al escritor Javier Ponce como ministro de Defensa en lugar de Wellington Sandoval y aceptó la renuncia de los mandos militares, quienes fueron sustituidos ayer.
En una ceremonia realizada en el presidencial Palacio de Carandolet, el general Fabián Varela asumió como jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, en reemplazo de Héctor Camacho.
El general Luis González asumió como comandante del Ejército en sustitución del general Guillermo Vásconez, mientras que el teniente general Rodrigo Bohórquez, fue designado comandante de la Fuerza Aérea, en reemplazo del teniente general Jorge Gavela.
En la Policía, el presidente Correa nombró a Jaime Hurtado como nuevo comandante, en sustitución de Bolívar Cisneros. El contralmirante Livio Espinosa se mantuvo al frente de la Armada.
El mandatario ecuatoriano reiteró ayer sus críticas al accionar de los organismos de Inteligencia en relación al bombardeo a la base de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ocurrido el 1 de marzo pasado, en el que murieron 26 personas.
Anunció que una comisión investigará “las conexiones ilegítimas de ciertos oficiales y servicios de Inteligencia con agencias extranjeras”.
“No vamos a permitir que nuestros servicios de Inteligencia no respondan al Gobierno nacional legítimo representante del pueblo ecuatoriano”, dijo.
Exhortan a Colombia y Ecuador a luchar juntos contra las FARC
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, recomendó ayer a los gobiernos de Colombia y Ecuador a combatir de forma coordinada a las FARC que operan en la frontera común.
“Sé que el Gobierno de Ecuador quiere a las FARC fuera de su territorio, (pero) el problema es el costo material y militar. No estoy seguro de que sea viable, así que debe hacerse de una manera compatible para los dos países”, puntualizó.
Insulza compareció ante una subcomisión del Congreso de Estados Unidos para analizar la crisis entre Colombia y Ecuador, en la que evitó condenar la violación a la soberanía de Ecuador, como ha exigido el presidente de ese país, Rafael Correa.
Por su parte, la misión especial designada por la OEA para facilitar el restablecimiento de las relaciones entre Ecuador y Colombia, terminó ayer en Bogotá “con satisfacción” sus tareas tras cuatro días de trabajo en los dos países.
El jefe de la delegación, el boliviano Víctor Rico, dijo que regresará a Washington convencido de la disposición de los Gobiernos colombiano y ecuatoriano “para avanzar de manera progresiva en la normalización de las relaciones entre ambos países”.
“Considero que es un tema fundamental, y con esta convicción voy a empezar mi informe al secretario general (de la OEA, el chileno José Miguel Insulza) el día de mañana”, agregó el diplomático boliviano.
