1.-Los proyectiles penetraron por el vidrio trasero y por la ventanilla de la puerta posterior del lado derecho. 2.-En el kilómetro diez agentes federales y estatales detuvieron a seis sospechosos.
El funcionario resultó ileso pero un elemento de la DEI pereció de por lo menos 10 impactos
Dos de la tarde, una de las avenidas más transitadas del oriente de la ciudad, un coche aún no identificado, por lo menos dos sujetos armados y la presencia de un agente estatal platicando con el jefe de la Policía Preventiva Gustavo Rivera Ramos formaron parte del escenario de un fatal atentado; los sujetos armados dispararon en contra del titular de Seguridad Pública Municipal y del agente de la Dirección Estatal de Investigación (DEI), Joaquín Name Galaviz, de 24 años, perdiendo la vida este último al recibir por lo menos diez impactos de bala.
DETALLE A DETALLE
La tarde de ayer en prolongación Pino Suárez, esquina con la calle Emiliano Zapata, de la colonia J. Guadalupe Rodríguez, por lo menos dos sujetos armados se acercaron a la camioneta del titular de Seguridad Pública, una Chevrolet, tipo Suburban, de color plateada, con placas FZX 2387, cuando se encontraba estacionada; a bordo estaban platicando Rivera Ramos y el agente de la DEI, Joaquín Name Galaviz.
Por lo menos dos sujetos se acercaron por la parte trasera del vehículo y empezaron a disparar, estrellando el vidrio trasero y el de la ventanilla de la puerta posterior, para después huir al parecer por la calle Emiliano Zapata hacia adentro de la citada colonia.
Mucha gente aunque no vio el momento preciso del ataque se percató que no se acercó ninguna patrulla para apoyar, pues se suponía que por radio activarían el código rojo; pasaron cuatro minutos y sólo llegó un carro blanco, al parecer de un escolta de Rivera Ramos.
NO HUBO APOYO INMEDIATO
Fue raro, comentaron los testigos, pues muy despacio arrancaron la Suburban y el auto blanco rumbo al oriente de la ciudad, dirección contraria a la Cruz Roja, poco más tarde se informó que Gustavo Rivera Ramos, el jefe policiaco, había llevado al agente a la citada clínica para su atención médica, pero ya había muerto.
Mientras tanto, los testigos y curiosos del atentado esperaban a que llegaran los agentes a investigar, pero no fue hasta después de media hora cuando unos peritos acudieron a levantar los casquillos; tres calibre .38 Súper, que estaban arriba de la banqueta y cuatro de .9 milímetros tirados en la cinta asfáltica.
El funcionario se trasladó al parecer a la Presidencia Municipal, para calmar un poco los nervios, mientras que, ahora sí planeaban el operativo con todas las corporaciones policiacas, especialmente en las salidas a la carretera a Torreón y a Mazatlán.
ACCIÓN EN CARRETERAS
Eran las 14:57 cuando personal de este medio de comunicación siguió la trayectoria de las unidades de la DEI que a toda velocidad se dirigieron a la carretera a Parral para tomar el libramiento y salir a la rúa Mazatlán, donde ya los agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP) y los de la Policía Federal Preventiva (PFP) habían detenido a una camioneta Suburban con seis tripulantes sospechosos.
Según la versión de los agentes vieron la Suburban sospechosa y le marcaron el alto, pero como ésta no se detuvo iniciaron una persecución, apoyados por la PFP y a la altura del kilómetro diez de la citada rúa, los retuvieron, pero después de investigarlos se dieron cuenta de que eran inocentes.
La citada zona de la carretera fue el punto de reunión de los agentes, pues ahí montaron una especie de retén con por lo menos diez unidades de la PEP, PFP y DEI, aunque estos últimos pronto se retiraron a seguir investigando.
NO ERA BLINDADA
A las 15:35 horas los agentes de Servicios Periciales procedieron a hacer su trabajo en la camioneta siniestrada a cargo de Gustavo Rivera Ramos, que quedó estacionada en las instalaciones de la Cruz Roja, anotando que en la parte posterior se apreciaban tres orificios producidos por arma de fuego, el vidrio trasero completamente quebrado y la ventanilla de la puerta posterior del lado derecho también estrellada a la mitad.
Justo en el interior de la puerta, abajo de la ventanilla derecha se apreciaba una gran mancha de líquido hemático y los restos del vidrio estrellado, también en el parabrisas se notaba un orificio del lado del copiloto sin conocerse si fue de salida o de entrada.
A las 16:15, después del trabajo pericial, la Suburban plateada fue remolcada por una grúa y trasladada a una pensión al oriente de la ciudad.