En Vicente Guerrero hay austeridad en el gasto en adornos navideños y salarios de trabajadores, los cuales exigen sea igual con funcionarios y regidores.
SITUACIÓN | Muestra de un año lleno de incidencias lamentables y limitaciones económicas de parte del Ayuntamiento hacia sus trabajadores.
Vicente Guerrero, Dgo.- Una notoria austeridad se observa en la instalación de las luces ornamentales a cargo del Ayuntamiento, reflejo de un año lleno de vicisitudes salpicadas de violencia con el sello del crimen organizado.
Limitantes. La clásica lona que da la bienvenida a los paisanos y algunas mangueras luminosas enrolladas en las palmeras más céntricas son todo lo que la Presidencia Municipal pudo ofrecer, para embellecer el mobiliario público.
Se ignora si es algo planeado estratégicamente para ahorrar o es simple apatía por involucrar a los guerrerenses en fechas tan conmemorativas.
Limosna. Policías, tránsitos y barrenderas a la calle a pedir su Navidad. Con la caja en la mano y la queja en la boca, empleados municipales andan de negocio en negocio pidiendo apoyo, argumentando que tienen derecho a ello.
En la Presidencia Municipal no les quisieron apoyar con su “doble quincena navideña”, a la que ya estaban acostumbrados y con la que contaban para dar aunque sea un abono a sus acreedores, quienes ya se cansan de cobrarles y nomás no les sacan nada.
Nunca antes los trabajadores del Ayuntamiento de Vicente Guerrero habían padecido tantas necesidades; las autoridades se quejan de falta de dinero y la aplicación de la austeridad en el gasto.
Los empleados señalan a este diario que esa austeridad debe ser equitativa, es decir que se aplique a los funcionarios, regidores y el Alcalde, pues se predica con el ejemplo.
Cronología
Desde principios de año se desató la violencia en Vicente Guerrero, lo cual desalentó la inversión y otros sectores productivos.
Este año el Alcalde anunció la disminución de la nómina; incluso, estima que se quedarán sin empleo cuando menos 60 burócratas.
Las calles no lucen como otros años; los adornos de Navidad son mínimos; para muchos, es la muestra de una época llena de vicisitudes.
Hasta los trabajadores del Ayuntamiento de manera indigna salen a las calles a pedir ayuda para su Navidad, pues no les dieron su doble quincena.
