Los integrantes de las comisiones de Justicia, Salud y Estudios Legislativos del Senado de la República ya dieron su voto a favor de la portación de dosis mínimas de droga para el consumo inmediato.
Así lo revela el dictamen de primera lectura que fue llevado al pleno de la Cámara Alta el 15 de noviembre de 2007, en el que se incluye un tabulador de sustancias “permitidas”, que contiene las mismas cantidades propuestas ahora por el presidente Felipe Calderón.
De acuerdo con la documentación de la Comisión de Salud del Senado, los legisladores federales ya manifestaron su acuerdo para la autorización de 2 gramos de marihuana, 2 gramos de opio, 50 miligramos de heroína, 500 miligramos de cocaína, 40 miligramos de metanfetamina y 0.015 miligramos de LSD.
En el documento también se dieron por buenos los mecanismos para no ejercer la acción penal, cuando sólo se trata de un farmacodependiente y no de un delincuente o narcomenudista.
En entrevista, el presidente de la Comisión de Salud del Senado, Ernesto Saro Boardman, defendió la iniciativa presidencial al asegurar que, por primera vez, se reconocerá al adicto a las drogas como un enfermo, no como un delincuente.
Explicó que el proyecto permite que la pena impuesta a un farmacodependiente sea conmutable por un tratamiento de rehabilitación contra las acciones, en el caso de que posea un narcótico en cantidad inferior o igual a la tabla que propone la iniciativa.
En el caso de que no sea adicto, explicó, podría incorporarse a un programa de prevención, pero en ninguno de los casos apartarlo de su vida normal y cotidiana en la que estaría en posibilidad de seguir en contacto directo con su familia y estudios o trabajo, condiciones que ayudarían a su rehabilitación.
