Avanza el euro hacia la supremacía
La divisa única europea, euro, avanza cada vez más como la segunda moneda de reserva de divisas a nivel mundial, aunque todavía está posicionada después del dólar, de acuerdo a un estudio del Deutsche Bank en Francfort.
El porcentaje del euro en las reservas mundiales de divisas ha subido de un 18 por ciento a un 26.5 por ciento desde su introducción en 1999, reveló un informe del Instituto de Análisis del banco.
La moneda única europea está cumpliendo poco a poco todos los parámetros para convertirse en la primera moneda de reserva de divisas a nivel mundial, lugar que ocupa Estados Unidos con un 64 por ciento.
Cuatro factores influyen de manera especial en este impulso del euro y pueden hacer que la moneda única gane terreno como divisa hasta 2010.
El primero de ellos es el tipo de cambio del dólar estadunidense, el segundo, cambios en la política internacional de los tipos de cambio. El tercero, la demanda de los bancos centrales y por último, una mayor fuerza de la orientación de rédito.
En datos concretos, el balance del Banco Central Europeo (BCE) desde 1999 tuvo más éxito que el de la Reserva Federal (Fed) y la media de la inflación en los países del euro entre 1999 y 2007 fue del 2.1 por ciento frente al 2.7 por ciento de Estados Unidos.
Hacia 2010 debería mejorar la situación, con un crecimiento dinámico más alto del dólar estadunidense de lo esperado y por otro lado, con una disminución del déficit de la balanza de préstamos de Estados Unidos.
Para ello, debería atenuarse el crecimiento de la economía en Europa de cara al desarrollo demográfico.
Con ésto, el dólar estadunidense conseguiría permanecer por más tiempo en el primer puesto de reservas mundiales, mientras que el euro continuaría en su segundo puesto.
Un sistema bipolar internacional de divisas no es por sí mismo inestable.
Por el contrario, debería fortalecer la disciplina de la política financiera y económica a ambos lados del Atlántico.
El eficaz y solvente mercado financiero del euro debería también poder superar la abrupta y extensa influencia del capital.
La recuperada posición del euro como divisa internacional de reservas no explica el alza del precio de las materias primas, inclusive el oro.
Por el contrario, los bancos centrales vendieron desde 2001 una décima parte de sus reservas de oro, que acabó con la carrera del precio del oro.
Por su parte, el precio de las materias primas habría aumentado debido al dinámico crecimiento de la economía mundial junto con el crecimiento de las economías populares asiáticas.
Las divisas internacionales tiene como ventajas tener un alto ámbito comercial de juego en la política económica y un bajo rédito de préstamos.
Pero también conlleva sus riesgos, como una elevada volatilidad de los tipos de cambios en la operación al contado y una fuerte alza del tipo de cambio del euro respecto al dólar estadunidense, estos son sin lugar a dudas, factores a tener en cuenta.
El BCE mantiene una postura neutral para explicar el crecimiento internacional del euro, según la cual el BCE cumplió con sus deberes internacionales en referencia a la estabilidad de precios y en su decidido y eficiente papel como ‘Entidad de la última liquidez’.
El Grupo del euro debe estar en su puesto para dar su voto para fortalecer las posibilidades de influencias internacionales del ámbito de la moneda única europea.