El presidente de Venezuela, Hugo Chávez (der.), habla hoy, 13 de mayo de 2008, en el Palacio de Miraflores, en Caracas, durante la firma de convenios de cooperación en el marco de la visita oficial del primer ministro de Portugal. (EFE)
El gobierno de Venezuela calificó de "inamistosos" los comentarios de la canciller alemana Angela Merkel, y externó su satisfacción de que Alemania no sea la única voz de la Unión Europea.
El gobierno de Venezuela 'se satisface al saber que Merkel no es la única voz de la Unión Europea y que un sólo país no podrá alterar ni las relaciones entre Venezuela y la Unión Europea, ni las relaciones bi-regionales'.
La cancillería venezolana consideró en un comunicado este martes que las declaraciones de Merkel "ponen en entredicho la intención del gobierno alemán de querer estrechar los lazos de amistad con todos los países latinoamericanos y caribeños".
'Sorprende al gobierno de la República Bolivariana de Venezuela que la canciller alemana, en vísperas de su visita a nuestra región para participar en la Cumbre (América Latina, el Caribe y la Unión Europea) en Lima, arremeta contra el presidente Hugo Chávez', indicó en un comunicado.
Agregó que el gobierno de Venezuela 'no se vale de comentarios hostiles hacia ningún miembro de la Unión Europea, cuando busca fortalecer sus relaciones con ese grupo regional'.
Un único país no puede dañar por mucho tiempo las relaciones entre la Unión Europea y América Latina. El presidente Chávez no habla por Latinoamérica', aseveró la canciller Merkel, en vísperas de emprender su primera gira oficial por Latinoamérica.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela respondió que el respeto a los principios "de igualdad y no injerencia" debe prevalecer para que las relaciones bilaterales y bi-regionales se desarrollen en un clima de "cordialidad".
La cancillería le recordó al gobierno alemán que Venezuela 'ni en el pasado, ni en el presente, ha sido factor de perturbación en Latinoamérica, Europa o el mundo'.
Sin embargo, el domingo pasado, Chávez reaccionó a las declaraciones de Merkel y en su programa audiovisual 'Aló presidente' en el que afirmó que la canciller alemana pertenece a la "misma derecha que apoyó a (Adolfo) Hitler, al fascismo".