El huracán tocó tierra en territorio estadounidense de South Padre Island y siguió hacia Port Isabel, Bahía Grande y Brazos Santiago Pass. (AP)
Tras el impacto, las autoridades estatales y municipales redoblaron la vigilancia en la zona costera, y recomendaron a los habitantes que no salgan a las calles.
Con vientos arrachados de hasta 190 kilómetros, el huracán “Dolly” impactó tierra poco después del mediodía, prácticamente en la línea divisora con el estado de Texas, Estados Unidos, por lo que el meteoro afectó al municipio de Matamoros.
El huracán tocó tierra aproximadamente a las 17:00 en horario GMT en territorio estadounidense de South Padre Island y siguió hacia Port Isabel, Bahía Grande y Brazos Santiago Pass, unos 50 kilómetros al nordeste de Brownsville, según el Centro Nacional de Huracanes (CNH), con sede en Miami (Florida).
El jefe de Epidemiología de la Secretaría de Salud, Alfredo Rodríguez Trujillo, señaló que en Matamoros se tienen cuatro albergues activados, donde se encuentran desde anoche mil 722 personas.
Las calles pasado este mediodía continúan desalojadas y todos los comercios y empresas cerraron sus puertas, en medio de un incesante zumbido producido por los vientos.
Desde la mañana, vehículos militares, de la policía, taxis y reporteros de los medios de comunicación recorren las colonias, donde la lluvia arrecia por momentos.
Las fuerzas de seguridad continúan trasladando a los albergues a las personas que en el último momento decidieron salir de sus casas.
De acuerdo con el gobernador Eugenio Hernández Flores, la zona de impacto entrará tras el impacto del huracán en una aparente calma, cuando el ojo del meteoro atraviese Matamoros.
Advirtió que la ciudadanía no debe confiarse ante esta situación, ya que esto será aproximadamente por dos horas, y posteriormente se resentirán los fuertes vientos.
