La colombiana Ingrid Betancourt dijo hoy emocionada que tratará de ser merecedora del premio Nobel de la Paz, al que la postula la presidenta Michelle Bachelet.
La colombiana Ingrid Betancourt dijo este miércoles emocionada que tratará de ser merecedora del premio Nobel de la Paz, al que la postula la presidenta Michelle Bachelet.
"Quiero agradecerles infinitamente por la confianza que me han dado. Voy a hacer todo lo posible para ser merecedora en cada una de mis acciones, de mis pensamientos y de mis palabras de eso que ustedes han querido que yo sea. Mil gracias a todos ustedes", expresó Betancourt con evidente emoción en declaraciones a la prensa luego de reunirse por casi una hora con la mandataria chilena en el palacio de gobierno, en la continuación de su gira latinoamericana.
Bachelet apuntó que el Nobel de la Paz reconocería la figura de Betancourt y "permitiría dar un nuevo aliento a la lucha por la paz en su patria y en muchas otras naciones del mundo".
La mandataria chilena postuló a Betancourt al premio Nobel apenas la dirigenta política colombiana fue rescatada en julio por comandos del ejército colombiano de su cautiverio de seis años al que la sometieron las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Betancourt, quien llegó por la mañana luego de estar en Buenos Aires con la presidenta argentina Cristina Fernández, intercambió elogios con la jefa de estado chilena, quien también lució emocionada.
A su llegada al palacio presidencial de La Moneda, un pequeño grupo de colombianos que agitaron sus banderas, aplaudieron a Bentacourt, que respondió con sonrisas.
Vestida con una traje dos piezas negro y una blusa del mismo color que resaltaba su delgada figura y palidez, Betancourt agradeció al pueblo chileno por el clamor y las oraciones que hizo por su liberación durante su cautiverio de seis años.
Ingrid Betancourt elogió también a la democracia chilena y a Bachelet, hija de un general de la fuerza aérea muerto en prisión por torturas durante la dictadura de Augusto Pinochet.
Manifestó que no tiene las credenciales para merecer el premio Nobel de la Paz.
"Me pone algo incómoda y quisiera no hablar de esto, pero lo tengo que hacer acá y luego en ningún otro lado. Acá sí lo quiero hacer porque es un gesto tan generoso, tan inesperado para mí que me obliga a tantas responsabilidades", expresó Betancourt.
Agregó que el gesto de la mandataria chilena la acerca a Chile de "manera íntima" y que siente que "hay una expectativa que no puedo defraudar" que le exige "estar a la altura de lo que ustedes quisieran que yo fuera".
La mandataria chilena, que calificó a Ingrid Betancourt de "extraordinaria mujer", la agasajó con un almuerzo al que asistieron altas autoridades y personalidades fundamentalmente mujeres.
Bachelet señaló que "la causa de Ingrid es nuestra causa" y que los padecimientos por los cuales pasó los sufrió con dignidad.
Aprovechó para llamar a la comunidad internacional a unirse para reclamar la liberación de todos los rehenes colombianos. "Es hora que se imponga el espíritu humanitario, que no queremos más secuestrados en Colombia ni en ningún otro país, (y) que nada es más importante que la vida, que la dignidad y que la libertad de las personas".
Betancourt por la tarde del miércoles ofrecía una conferencia de prensa antes de viajar a Perú en la continuación de la gira que inició esta semana por varios países de la región.
