Durante el séptimo mes del año se realizaron cinco millones 633 mil 300 operaciones de envíos de dinero.
El ingreso de divisas al país por concepto de remesas alcanzó los dos mil 15.04 millones de dólares en julio pasado, lo que implicó una baja de 6.93 por ciento en comparación con igual mes de 2007, cuando sumaron dos mil 107.4 millones.
De esta forma, en los primeros siete meses del año, los envíos de los migrantes mexicanos, la mayoría de ellos en Estados Unidos, alcanzaron 13 mil 615.81 millones de dólares, lo que implicó un descenso de 2.91 por ciento respecto a igual periodo de 2007.
De acuerdo con cifras del Banco de México (Banxico), en el séptimo mes del año se realizaron cinco millones 633 mil 300 operaciones de envíos de dinero, la mayor parte a través de transferencias electrónicas. Así, por transferencias ingresaron al país mil 914.18 millones de dólares, por money orders 55.42 millones y en efectivo y especie 45.43 millones. En julio pasado, el monto promedio de envíos que recibieron las familias mexicanas fue de 480.38 dólares.
Las remesas alcanzaron durante el año pasado 23 mil 979 millones de dólares, lo que implicó un marginal incremento de uno por ciento en comparación con el cierre de 2006, y para el cierre de este año se prevé un cierre negativo. En distintas ocasiones, el Banxico ha dicho que el menor dinamismo en el envío de remesas al país ha obedecido a diferentes factores, entre ellos la desaceleración económica en Estados Unidos, principalmente en la industria de la construcción.
Al segundo trimestre del año, este sector productivo ocupó al 20.5 por ciento de los trabajadores migrantes mexicanos. Ello, aunado a los mayores problemas que tienen los mexicanos para emigrar al vecino país del norte, dada la mayor vigilancia fronteriza y una mayor dificultad para encontrar empleo en la Unión Americana.
De acuerdo con el banco central, la entrada de remesas sigue siendo una fuente significativa de ingresos para un número importante de familias mexicanas.
