La Secretaría de Gobernación a cargo de Francisco Ramírez Acuña presentó a principios de diciembre una controversia constitucional en contra de la investigación que le realiza la Auditoría Superior, pero no pudo detener el proceso. (Archivo)
La Auditoría Superior revisa los procedimientos que siguió Gobernación para la autorización de más de 400 sorteos.
La Dirección General de Juegos y Sorteos de la Secretaría de Gobernación (Segob) se encuentra bajo la lupa de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y de la Secretaría de la Función Pública (SFP).
La ASF practica las revisiones 7/2007 y 8/2007 “respecto de la autorización y otorgamiento de modificaciones de permisos de grandes permisionarios”, así como al proceso de “autorización y expedición de permisos de sorteos”, cuyos resultados estarán listos este mismo mes.
Gobernación presentó a principios de diciembre una controversia constitucional en contra de la decisión de la ASF; sin embargo, la dependencia a cargo de Francisco Ramírez Acuña no logró detener el procedimiento de auditorías.
“Se concedió la suspensión de los actos impugnados para que, sin perjuicio de que la ASF continúe los procedimientos de fiscalización correspondientes, se abstenga de ejecutar cualquier resolución o dictamen que se llegue a emitir con motivo de las auditorías a que aluden los oficios impugnados, hasta en tanto la Suprema Corte de Justicia de la Nación se pronuncie respecto al fondeo del asunto”, estableció la ASF.
La Segob se inconformó ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por las auditorías de la ASF, porque, en su opinión, “se excedió” en sus facultades auditoras.
Las revisiones no son sobre fondos, porque la Dirección General de Juegos y Sorteos no maneja recursos, sino que son auditorías al desempeño, en particular tienen que ver con la aplicación de la Ley Federal de Juegos y Sorteos.
La ASF, que dirige Arturo González de Aragón, ha puesto la lupa en una serie de permisos otorgados por Segob.
Gobernación ha sostenido que no ha otorgado nuevos permisos para casinos y casas de apuestas o bingos, desde mediados de 2005.
Informes a los que tuvo acceso revelan que Administradora Mexicana de Hipódromo (AMH), SA de CV, hizo el 8 de abril de 2005 una solicitud de ampliación de su permiso para abrir 65 locales, lo cual le fue aceptado en mayo de 2007 por la Dirección General de Juegos y Sorteos.
Dicha compañía es parte de CIE (Corporación Interamericana de Entretenimiento), uno de los conglomerados más grandes en el ramo en América Latina con sede en Madrid, España.
AMH tiene a su cargo la operación del Hipódromo de las Américas en la Ciudad de México, junto al Centro Banamex, La Granja Las Américas, Sports Books, Yaks y el Royal Derby.
De esta manera, aun cuando Gobernación no ha otorgado nuevos permisos, a AMH sí le fue aceptada una ampliación.
Además, al menos 23 grandes permisionarios pueden abrir hasta 194 nuevas casas de apuestas remotas y 191 salas de juegos de números cuando lo decidan, con permisos autorizados por Segob antes de 2005, porque cada autorización otorgada les permite abrir varios establecimientos.
Sin embargo, hay excepciones, por ejemplo, en algunas entidades como Baja California, una compañía puede poner en marcha un número ilimitado de este tipo de negocios.
La ASF también revisa los procedimientos que siguió Gobernación para la autorización en 2006 de más de 400 sorteos.
Según informes oficiales, el Órgano Interno de Control de la Segob, que depende de la SFP, desarrolla las auditorías 25/2007 y 23/2007.
La Secretaría de la Función Pública —que encabeza Salvador Vega Casillas— concluyó las auditorías 08/2006 y 1/2007, sobre las cuales emitió 12 observaciones, pero no encontró ninguna irregularidad.
Una de las recomendaciones de la SFP obligará a Segob a poner en marcha el Sistema Informático de Juegos y Sorteos.