Cuauhtémoc Blanco demostró porqué la directiva albiverde puso sus ojos en él y celebró junto a sus compañeros los tres goles conseguidos ayer en el Estadio Corona. (Fotografía de Ramón Sotomayor Covarrubias)
Nadie habla en el Corona más que del nuevo refuerzo: Cuauhtémoc Blanco.
Se ve bien de verde y blanco. Pero hay quienes en la tribuna no lo olvidan de azulcrema. Como sea, la afición sabe que Cuauhtémoc Blanco es garantía de gol y buen futbol, por eso vistieron la casaca con el número nueve del Santos y uno que otro despistado del América.
Y fue su tarde. Igual para el “Cuau” que para la afición. Claro que todo mundo estaba feliz por ver de nuevo a los Guerreros en una liguilla, pero definitivamente el foco de atención, incluso mucho antes de salir a la cancha, fue el nuevo refuerzo santista para la fase final del Apertura 2008.
Nadie hablaba de otra cosa que no fuera el préstamo del flamante jugador del Chicago Fire de la Major League Soccer (MLS) de Estados Unidos: Que si junto a Matías Vuoso y Daniel Ludueña serían el terror del San Luis; que si el jugador se veía contento por venir a La Laguna; que si reforzaría al equipo más allá de la liguilla hasta abril; que si anotaría la tarde de ayer su primer gol con los de casa...
Los ojos estarían puestos en el “Temo” toda la tarde, que pronto se convirtió en noche. El ánimo estaba caliente, igual que el clima que perdonó el frío que se había sentido días atrás.
Desde la entrada, el folleto obsequiado por la directiva santista predisponía la tarde para el ex jugador de la Selección Mexicana. Ya dentro, todos esperaban el momento en que aparecería en la cancha del Estadio Corona. Otras veces ya había estado en ella, pero defendiendo los colores del América, el Necaxa o el Veracruz. Sería la primera vez que estaría en el frente santista.
Y como todo un “Guerrero Blanco” apareció por primera vez. Todavía en pants, Alejandro Irarragorri lo llevó hasta la media cancha para que la afición le diera la bienvenida como se merece. Tímido al inicio, Blanco alzo los brazos en señal de agradecimiento y como si fuera una promesa de entrega total. La empatía fluyó natural de un lado y del otro de principio a fin, tal cual si hubiera jugado durante todo el torneo en Torreón.
Al momento de salir del “gusano” ya con la casaca de local, “Cuau” se vio como uno más. Fue el sexto en saltar a la cancha, ante la aclamación unánime. Ahora los gritos no fueron tan fuertes como de costumbre para Matías Vuoso o Iván “Guti” Estrada, cuando el sonido local anunció la alineación. Todos esperaban un solo nombre y lo aguantaron hasta el final. “Y con el número nueve... Cuauhtémoc Blanco”. El Corona se le entregó sin dudar.
Se dio tiempo para saludar a su antiguo técnico Raúl Arias -a quien ahora le tocaría enfrentar- lo mismo que a la tripleta arbitral. Y se vio muy dispuesto a la hora de encabezar la manta de apoyo para Christian Benítez, el atacante a quien entró a suplir por lesión.
Aficionados santistas y americanistas se unieron por el “Cuau”. En el círculo central se colocó junto al “Mati” para esperar el silbatazo inicial del árbitro. Vuoso le dio su primer pase del juego, el primero también con el Santos Laguna. Antes del minuto cinco ya había conseguido también el primer tiro de esquina.
El segundo toque lo consiguió vía Juan Pablo “Chato” Rodríguez y así le siguieron muchos más, todos aplaudidos sin parar por la multitud, que igualmente abucheó cada una de las entradas que recibió el nueve de parte de la defensa potosina.
Y es que el “Temo” demostró por qué la directiva albiverde puso sus ojos en él. Peleó cada pelota, repartió pases de “taquito”, cobró tiros libres, consiguió tiros de esquina, presionó desde la salida del portero de los Gladiadores -el otrora santista Adrián Martínez-, celebró junto a sus compañeros los tres goles conseguidos y hasta dio el pase para el segundo tanto de los albiverdes para el “Hachita” Ludueña.
Voluntarioso, participativo, entusiasta. Así fue Cuauhtémoc en la cancha del Corona, por eso nadie podía creer cuando diez minutos antes de que acabara el encuentro se enfiló hacia afuera del terreno de juego. Imposible que saliera de cambio. “Cuau” pensó que era él quien sería sustituido al ver en la pizarra electrónica del árbitro suplente el número diez, pero no recordaba que ahora con los Santos vestía el nueve. Entonces se quedó hasta el final del partido, que concluyó con la ovación de pie por parte de los aficionados Guerreros. Lo único que faltó fue su gol, después de los tres en que mucho contribuyó. Pero después de todo no hay duda: de verdad que a Cuauhtémoc Blanco el verde y blanco le sienta bien.
Los números del fin de semana
La exhibición del campeón Santos Laguna, para derrotar 3-1 al superlíder San Luis, lo pone como el equipo con la mejor ofensiva al concluir la ronda de partidos de ida de cuartos de final del Torneo Apertura 2008 del futbol mexicano.
Por su parte, Cruz Azul, Pumas de la UNAM, Tecos UAG y Toluca están con las mejores defensivas y en la clasificación de goleo individual hay cinco jugadores empatados, con un tanto, en primer lugar.
Resultados partidos de ida: Cruz Azul 0-0 Pumas UNAM, Tigres UANL 1-1 Atlante, Tecos UAG 0-0 Toluca, Santos 3-1 San Luis.
Clasificación de ofensiva:
1. Santos 3
2. San Luis 1
3. Tigres UANL 1
4. Atlante 1
5. Cruz Azul 0
6. Pumas UNAM 0
7. Tecos UAG 0
8. Toluca 0
Clasificación de defensiva:
1. Cruz Azul 0
2. Pumas UNAM 0
3. Tecos UAG 0
4. Toluca 0
5. Atlante 1
6. Tigres UANL 1
7. Santos 1
8. San Luis 3
Goleo individual:
1. Daniel Ludueña (ARG) Santos 1
2. Matías Vuoso Santos 1
3. Víctor Píriz (URU) San Luis 1
4. Hugo Sánchez Tigres UANL 1
5. Luis Gabriel Rey (COL) Atlante 1
Autogol:
1. Óscar Mascorro San Luis 1