El Alto Tribunal le concedió un permiso para estar con Jayden James y Sean Preston previo a las vacaciones de Navidad.
La cantante estadounidense Britney Spears decidió pasar unos días con sus dos hijos, previo a las vacaciones de Navidad, con lo cual anula su posible participación en la gira de Madonna, Sticky & Sweet.
Tras un permiso que le concedió el Alto Tribunal para estar con Jayden James y Sean Preston, la intérprete canceló un encuentro que tenía previsto con la “Reina del Pop”, quien continuará su tour por Europa y América.
Este año Britney perdió la custodia de sus hijos, la cual le fue otorgada a su ex esposo y padre de los niños, Kevin Federline, situación por la que Spears había planeado estar en Miami las semanas siguientes, lo que le permitiría actuar en la gira de Madonna.
Sin embargo, según informes de prensa, ahora la prioridad de la intérprete de Baby One More Time es pasar el mayor tiempo posible con sus pequeños.
Las circunstancias “han cambiado en los últimos meses”, declaró una fuente cercana a Spears, quien, debido a los escándalos en los que se vio envuelta por el consumo de sustancias tóxicas, había perdido el derecho de visita.
La artista ingresó de urgencia al hospital en varias ocasiones, lo que llevó a Federline a reclamar la guarda y custodia de los pequeños, por lo que ambos padres comparecieron ante los tribunales para llegar a un acuerdo.
Así, Britney Spears recibió recientemente una resolución del juez, en la que le permitirá pasar unos días con sus hijos, antes de las vacaciones de Acción de Gracias.
Vigilan a sus paparazzi
Están en todas partes, haga frío o calor. Vigilan sigilosamente la puerta del apartamento, se esconden bajo el coche familiar y fotografían la visita semanal al centro estético. ¿Son “voyeurs”? No, “paparazi”.
El canal español de documentales The Biography Channel, estrenó el especial Objetivo: Britney Spears, en el que se analiza hasta dónde son capaces de llegar los “paparazzi” que siguen los pasos de la cantante.
El morbo está asegurado. La caótica vida de Britney es el sueño de cualquier fotógrafo a sueldo. Con sólo 26 años, Britney se ha casado y divorciado en dos ocasiones, tiene dos hijos de los que ha perdido la custodia y ha estado ingresada en varias clínicas de desintoxicación.
Por ello, el especial quiere analizar cómo los “paparazzi” están siempre al acecho, intentando lograr una imagen exclusiva de la estrella, cada vez que su vida parece dar un nuevo giro.
