MEXICO, DF.- A partir del martes de esta semana, Controladora Comercial Mexicana (CCM) presentará un plan de reestructuración financiera a sus principales acreedores con 800 millones de dólares sobre la mesa.
De acuerdo con analistas, la compañía ha mencionado que habrá propuestas para ambos, tanto tenedores de bonos y acreedores tradicionales (alrededor de 800 millones de dólares), como acreedores de derivados. La compañía estima una obligación de mil 80 millones de dólares de pasivos por instrumentos derivados, pero sus contrapartes estiman una cifra mucho más alta, según analistas de Banamex Acciones y Valores.
La noticia constituye un signo positivo, pues una rápida negociación de sus obligaciones financieras permitiría a la Comer continuar su operación de manera viable, expresaron los analistas.
CCM entró en el ojo del huracán después de la intensa volatilidad cambiaria producida a partir de la segunda mitad del año; en una semana la empresa declaró pasivos relacionados con instrumentos derivados por 2 mil millones de dólares.
Posteriormente la Comer solicitó a las autoridades el concurso mercantil para renegociar sus deudas, pero a la fecha las autoridades han rechazado en dos ocasiones la solicitud y la última que presentó aún no tiene respuesta.
Si la propuesta de CCM pone las bases para una rápida negociación, la necesidad de entrar a concurso mercantil disminuirá apreciablemente. Esto podría significar buenas noticias, pero los inversionistas deben tener presente que esta alternativa no ha sido eliminada, como algunas de las contrapartes de los instrumentos derivados que han abierto demandas judiciales en contra de la compañía en otros países, según Banamex Accival.
El panorama para la Comer se complica más debido a que sus principales acredores en México reclaman una suma de 114 millones de dólares sin disposición a negociar, de acuerdo con agencias informativas.
CCM ha incumplido en el pago de certificados bursátiles en manos de unos mil inversionistas, incluyendo fondos y particulares, y analistas esperan que la empresa busque negociar una reducción de sus pasivos.