Personal de la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), trabaja en México para determinar el origen del presunto brote de salmonela que se atribuye al tomate nacional.
El secretario de Salud estadunidense, Michael Leavitt, informó en conferencia de prensa que aún no se puede hablar de los estados en los que se descartó la presencia del microorganismo, toda vez que se trata de una investigación en curso.
Luego de visitar una empresa de alimentos enlatados ubicada en la Zona Industrial Xalostoc de este municipio, destacó el interés de las autoridades de su país en conocer el sitio en el que comenzó el brote, bajo el principio de que se trata de un problema sanitario y económico.
Recordó que desde que se conoció de la presencia de salmonela Saintpaul en el tomate, se presumía su procedencia en una amplia zona entre México y Florida, por lo que se trabaja en delimitarla.
El funcionario estadunidense confirmó también que la FDA está en el proceso de abrir tres oficinas regionales fuera de la Unión Americana para certificar la inocuidad de los productos que pretenden comercializarse en su país desde su fabricación.
Una de ellas se abrirá en China antes de que concluya el año, otra en India y una más en América Latina, cuya sede podría ser México, aunque éstas últimas estarían listas hasta 2009, puntualizó.