El presidente George W. Bush y otros dirigentes mundiales se reunían este viernes por la tarde para explorar formas de evitar una repetición de la crisis financiera y crediticia mundial.
Es una empresa difícil, pero Bush espera que se pueda esbozar una posición común durante la cumbre extraordinaria, que comenzará este viernes con una cena seguida por deliberaciones a puerta cerrada el sábado.
Antes de la conferencia, Bush advirtió el jueves a sus contrapartes que no sofoquen la economía global bajo el peso de las nuevas regulaciones financieras. "Debemos reconocer que la intervención gubernamental no es la cura de todos los males", dijo Bush. "Nuestro propósito no debería ser más gobierno. Debería ser un gobierno más inteligente".
Bush adelantó su propio plan, que incluye endurecer las normas de contabilidad, revisar las previsiones contra el fraude en la contratación de acciones y otros instrumentos financieros, y mejorar la coordinación reguladora entre los países. Empero, no aceptó la imposición de normas reguladoras y supervisoras de gran calado como claman muchos países europeos.
"Queremos cambiar las normas del mundo financiero", dijo el presidente francés Nicolas Sarkozy antes de acudir a Washington.
Los europeos desean suprimir las salvedades que permiten a algunas instituciones financieras evadir la supervisión reguladora, y asegurar la supervisión de todas las grandes empresas que intervienen en los mercados financieros, incluyendo las empresas clasificadoras de riesgos o los fondos de inversión que acarreen cuantiosas deudas.
"Hay necesidad de actuar con premura", afirmó el primer ministro británico Gordon Brown, que desea organizar una nueva red de reguladores globales que seguirían la pista a las mayores instituciones financieras del mundo.
Los europeos son partidarios además de crear un sistema de alarma incipiente que vigilaría las burbujas financieras como la ocurrida con el mercado de la vivienda en Estados Unidos, causado por las hipotecas de alto riesgo. Además, desean obtener promesas de que serán adoptados cambios específicos en los próximos 100 días.