El cardenal Tarcisio Bertone (c), secretario de Estado de El Vaticano, acompañado del nuncio apostólico en Cuba, Luigi Bonazzi (der.) transmitió ayer el mensaje del Papa Benedicto XVI a los obispos cubanos a renovar el impulso evangelizador llevado a la isla por Juan Pablo II. (EFE)
Llama el secretario de Estado, Tarcisio Bertone, a sostener un espíritu de respeto y entendimiento mutuo.
El secretario de Estado de El Vaticano, Tarcisio Bertone, manifestó ayer en la capital cubana su deseo de lograr un “nuevo impulso” a las relaciones Iglesia-Estado en Cuba a 10 años de la visita de Juan Pablo II a esa isla caribeña.
“Albergo la esperanza de que la celebración de este aniversario contribuya a dar un nuevo impulso a las relaciones entre el Estado y la Iglesia Católica en Cuba”, indicó el purpurado en un mensaje dirigido a los obispos de ese país.
El escrito, difundido por la sala de prensa de la Sede Apostólica, auguró que “en espíritu de respeto y entendimiento mutuo, la Iglesia pueda llevar a cabo plenamente su misión, estrictamente pastoral y al servicio de sus fieles, con la debida libertad”.
El máximo responsable político del Estado Pontificio, que llegó la noche del miércoles a La Habana para cumplir una gira de trabajo por el país caribeño, expresó a los prelados que el Papa Benedicto XVI le pidió transmitirles un “afectuoso saludo y su cercanía espiritual”.
“En efecto, el Papa conoce bien la situación de la Iglesia cubana, la lleva en su corazón y la tiene muy presente en sus oraciones. Les puedo asegurar el interés y el apoyo del Santo Padre por cada uno de ustedes”, añadió.
El purpurado se dijo convencido de que el aniversario de la visita apostólica de Karol Wojtyla en 1998 será también una “ocasión privilegiada” para impulsar una “intensa labor pastoral que produzca una honda renovación de la vida cristiana”.
Animó a los obispos cubanos a intensificar “aún más si cabe” la acción pastoral en una Cuba en la que “la misión es grande y los obreros son pocos”.
“Una acción pastoral vocacional seria, sistemática y capilar, que haga llegar al corazón de los jóvenes cubanos el llamado a una entrega incondicional al Señor y a su reino de amor”, añadió. Al finalizar el mensaje, el secretario de Estado del Vaticano invitó a los obispos que lo acompañaban a dialogar acerca del “importante aspecto” de las relaciones entre la Iglesia y el Estado en Cuba.
PROPONE OBAMA CAMBIAR RELACIÓN CON CUBA
Los aspirantes presidenciales demócratas Barack Obama y Hillary Clinton discreparon anoche en su política hacia Cuba, luego que el primero aceptó reunirse sin precondiciones con Raúl Castro, a diferencia de la senadora por Nueva York.
Obama, quien había dicho en debates previos que aceptaría reunirse con Fidel Castro, sostuvo que ahora lo haría con su hermano Raúl si es declarado presidente del país, sin condiciones, pero con preparativos previos.
“Es importante asegurarse que haya una agenda y que en ella estén los derechos humanos, la liberación de los prisioneros políticos y la apertura de la prensa”, señaló.
El senador por Illinois dijo que condicionar un encuentro con el líder de otro país, es continuar la “arrogancia” en política exterior que ha caracterizado a la Administración Bush.
“Apoyo la eventual normalización. Y es cierto que pienso que nuestra política ha sido un fracaso”, subrayó.
“Creo que es importante que Estados Unidos no hable sólo con sus amigos sino también con sus enemigos. De hecho allí es creo yo donde la diplomacia hace la mayor diferencia”, añadió.
En contraste, Clinton sostuvo que de llegar a ser presidenta ella no se reuniría con Raúl Castro “a menos que haya evidencias de que el cambio está ocurriendo, porque es importante que estén comprometidos a cambiar la dirección”.
Elegirá Parlamento a nueva generación de líderes
El parlamento de Cuba elegirá el domingo a nuevos representantes del Consejo de Estado que liderará a este país en los próximos cinco años.
Es seguro que el Parlamento mantendrá a la familia Castro en el control del poder, al reemplazar a Fidel con su hermano más joven, Raúl, como presidente. Raúl Castro, de 76 años, ha figurado como principal aspirante a ese cargo durante décadas, y fue titular interino desde que el máximo líder cayó enfermo en julio de 2006.
Fidel, de 81 años, dijo el martes que no piensa aceptar otro mandato.
Ya Raúl habló de “cambios estructurales” no especificados, y pidió una abierta discusión de problemas que existen en el sistema comunista. Pero se ignora qué tipo de cambios permitirá el liderazgo comunista y posiblemente la elección de vicepresidentes será crucial para determinar si habrá cambios de importancia.
Corresponderá a la Asamblea Nacional de 614 miembros elegir a las 31 personas del Consejo de Estado.
Fidel Castro, quien fue reelegido como diputado, podría permanecer en el Consejo, pero es muy difícil que reciba un alto puesto.
Si bien nada es seguro, la mayoría espera que Raúl sea el próximo presidente. Se ignora, sin embargo, quién ocupará el cargo de primer vicepresidente.
El principal candidato es Carlos Lage, de 56 años, una generación más joven que los hermanos Castro. Ya es uno de los vicepresidentes, y como secretario de Gabinete es una especie de primer ministro de facto.
