Ante el serio problema de contaminación que genera la operación de establos, rastros y mataderos, la Jurisdicción Sanitaria Número Dos está promoviendo la aplicación de medidas alternativas para el tratamiento y disposición de los residuos que generan.
El coordinador de Rastros de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Durango (Coprised), Gustavo Rodríguez Santos, informó que por este motivo, el próximo jueves 28 se impartirá un taller a los encargados de dichos establecimientos en las oficinas de la delegación regional de la Sagarpa, con la cual se trabaja coordinadamente.
Refirió que en la actualidad, el funcionamiento de establos implica la generación de un millón 500 mil kilogramos de estiércol diariamente en la Región Lagunera, los que se convierten en una fuente importante de contaminación al producir gas metano. De éstos sólo una mínima parte se aprovecha como abono en tierras de cultivo.
Aunque en menores cantidades, los mataderos también producen de 15 a 20 kilogramos de desechos orgánicos, otros 100 de contenido ruminal o heces fecales y otros 30 litros diarios de sangre en promedio por cada uno, aunque en este último caso es necesario señalar que es altamente contaminante.
En el caso de los establos, la dependencia sanitaria está promoviendo la adopción de alternativas para reducir los niveles de contaminación, mediante el proyecto de un biodigestor, a través del cual se captan los desechos y el gas metano que emiten se aprovecha en la producción de energía.
Actualmente este proyecto se aplica con resultados favorables en cuatro establos de Coahuila, ubicados en Batopilas, El Cuije, Zaragoza y Fresno del Norte, en los que incluso los dueños de esas propiedades han reducido considerablemente los gastos por el consumo de energía eléctrica.
Rodríguez Santos expuso que las ventajas de este proyecto son el bajo costo que implica y además, contribuye al ahorro de energía.
Con relación a los rastros y mataderos, se pretende que todos los desechos de sangre, orgánicos y hasta los que son el resultado de aseguramientos o decomisos, se reúnan en una capa para cubrirla con otra de aserrín de madera, luego vaciar otra de material fecal y aplicarles un desnaturalizante biológico para crear una composta, la cual puede ser empleada como abono orgánico de tierras.
En este caso, el coordinador de Rastros manifestó que la acumulación de los desechos a través de este proceso no genera olores y detiene su descomposición, además de que se les da un destino adecuado en lugar de vaciarlos a la intemperie, lo que genera filtraciones al subsuelo y por lo tanto es una fuente de contaminación para los mantos acuíferos.
Gustavo Rodríguez consideró que aunque se tienen identificadas las fuentes de contaminación y existe la coordinación necesaria entre las dependencias encargadas de aplicar medidas para reducir esta problemática, se requiere aterrizar proyectos como los que se están promoviendo, pues de una forma práctica y económica contribuyen a generar mejores condiciones.
El problema
La Jurisdicción Sanitaria Número Dos promueve la adopción de medidas para reducir los niveles de contaminación por el funcionamiento de establos, rastros y mataderos, a través de proyectos para aprovechar los desechos que éstos generan.
En toda la Comarca Lagunera (Coahuila y Durango) existen alrededor de 330 establos.
En los 12 municipios de La Laguna de Durango se cuenta igual número de mataderos en el medio rural.
A esto se suman los ocho rastros urbanos.
FUENTE: Oficina regional de Coprised
