Tan sólo en España entre 40 mil y 50 mil mujeres y niñas son víctimas de la trata de seres humanos.
Cada año 1.2 millones de niños en todo el mundo son víctimas de la trata de seres humanos, un negocio que mueve anualmente unos 2 mil 700 millones de euros, casi 4 mil millones de dólares, según datos de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
En declaraciones antes de participar en el congreso sobre la trata de niños organizado por Save The Children, la coordinadora para la lucha contra la trata de seres humanos de la OSCE, Eva Biaudet, advirtió de que se trata de un problema muy grave que además “va en aumento”.
Sólo en España, explicó, hay unos 20 mil menores, identificados por la policía, que han sido obligados a prostituirse, mendigar o cometer delitos, o que han sido víctimas de redes de delincuencia internacionales que los han utilizado para la explotación laboral, adopciones ilegales o incluso tráfico de órganos.
El gran reto de todos los gobiernos y las instituciones internacionales que luchan contra la trata de seres humanos es “identificar a las víctimas” para saber qué situaciones les hacen “más vulnerables” y evitarlas.
“Los niños son más fáciles de reclutar, convencer y trasladar que los adultos, y por tanto, frente a unos costes muy bajos, generan un beneficio económico tremendo. Son cantidades impresionantes”, apuntó.
Biaudet puso como ejemplo que mientras que un niño que mendiga en Viena o Madrid puede sacar cien euros (147 dólares) al día, las niñas obligadas a prostituirse generan unas ganancias de entre mil y tres mil euros semanales (mil 470 y 4 mil 410 dólares)
“Si tenemos en cuenta que un proxeneta paga aproximadamente unos 3 mil euros por cada niña, en una semana habrá amortizado la compra y a partir de ahí sólo tendrá beneficios”, señaló.
La responsable de Save The Children, Liliana Orjuela, explicó además que la explotación infantil no se limita a los países del tercer mundo, sino que Europa también es una región de origen, especialmente los países más pobres como Rumania o las ex repúblicas soviéticas, donde hay muchos menores “en situación de riesgo”.
De hecho, las desapariciones de mujeres y niños, advirtió, suelen estar vinculadas a la trata de personas porque las efectúan redes internacionales de delincuencia que trabajan con unos procedimientos “muy sofisticados” que hacen muy difícil descubrir el paradero de estos seres humanos que serán utilizados para la explotación.
Según datos de Save The Children y de la Red Española contra la Trata de Personas, en España entre 40 mil y 50 mil mujeres y niñas son víctimas de la trata de seres humanos, procedentes de Marruecos, África subsahariana, países del Este, Brasil y Centroamérica, que son engañadas y traídas a España, donde “hay una gran demanda” .
Para combatir la explotación infantil -el tercer negocio criminal mundial sólo por detrás del tráfico de drogas y de armas-, esta ONG cree que lo prioritario es identificar a las víctimas, poner en marcha planes de acción que ayuden al menor, y dar formación y apoyo a las autoridades judiciales y policiales.
Además, aconsejan a las autoridades que les faciliten automáticamente el permiso de residencia por razones humanitarias y que se les busque una familia de acogida mientras que se estudia la conveniencia de aprobar una reunificación familiar.