Buscan a otros dos miembros de la banda que pidió 300 mil pesos de rescate.
Dos personas que secuestraron a un comerciante la semana pasada y, tras liberarlo, lo extorsionaron en los días siguientes, fueron detenidos ayer por agentes de la Procuraduría de Justicia de Coahuila que busca a otras dos personas involucradas.
José Rosendo Lozano de 21 años y Gerardo González García de 20, son acusados de haber secuestrado a un comerciante el pasado sábado seis de diciembre afuera de su negocio, para cobrar un rescate de 300 mil pesos.
La víctima y su familia, cuyos datos se omiten por seguridad, sólo pudieron reunir 85 mil pesos, pero fue liberado por sus captores, sin que se diera aviso a la Policía o se hubiera presentado una denuncia.
Sin embargo, la avaricia de los delincuentes se manifestó cuando volvieron a llamar por teléfono a su víctima para extorsionarlo y exigir el pago de 120 mil pesos, con la amenaza de que si no pagaban decapitarían a un miembro de su familia.
La amenaza surtió efecto y la familia buscó la forma de pagar el dinero, por lo que llegaron a pagar hasta 205 mil pesos. Pero los secuestradores advirtieron que necesitaban completar los 300 mil pesos de la demanda de rescate original, situación que fue intolerable para la familia, por lo que decidieron denunciar.
Ayer, agentes de la Policía Ministerial detuvieron a Lozano y a González García, quienes dijeron ser parte de la banda “La TyA”, por la colonia Torreón y Anexas, en el Sur de la ciudad, donde viven.
Los detalles del secuestro no se dieron a conocer, pero en una entrevista, Lozano admitió ser el autor de las llamadas de extorsión y reveló que había más cómplices que le daban instrucciones. “Yo sólo hacía las llamadas y leía lo que me indicaban”, dijo.
La Procuraduría busca a otros dos sospechosos, entre ellos una persona que formaba parte del círculo cercano al comerciante plagiado, y quien sería el cabecilla de la banda.
Esta es la tercera banda de secuestro que es desarticulada en Torreón en los últimos tres meses. Fernando Olivas, delegado de la Procuraduría dijo que este caso resalta la importancia de la denuncia.
Olivas señaló que fue de vital importancia la denuncia de los afectados, lo que permitió que se iniciara la investigación que logró la captura, ganándose la confianza de la víctima, por lo que reiteró el exhorto a otras víctimas de secuestro para que se denuncien los delitos.
En septiembre pasado, la Procuraduría detuvo al líder y un presunto miembro de una banda llamada “Los Termos”, que operaba en Torreón y Lerdo. A la semana siguiente desarticuló a la banda llamada “La familia de Ciudad Juárez”, logrando la captura de diez de sus integrantes, aunque cuatro más siguen prófugos.
Lozano y González García serán puestos a disposición del agente del Ministerio Público para que se integre la averiguación previa y en las próximas horas se resolverá su situación jurídica, pues se les puede dictar auto de formal prisión o arraigo para recabar más pruebas.