Las plagas que aquejaron al campo durante este año podrían morir ante las bajas temperaturas que se registran en el municipio.
BENEFICIOS
Las bajas temperaturas permitirán a los sembradíos librarse de las plagas para el próximo año.
Durango. Más allá de las afectaciones a la salud y de las carencias que resaltan en el medio rural a causa del frío, son más los beneficios que éste traerá para los sembradíos del municipio de Durango; según lo afirmó Roberto Arreola Arreola, presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del Ayuntamiento, quien consideró que las bajas temperaturas librarán a los campesinos de las plagas para el próximo año.
Se mueren las plagas. El cuarto Regidor explicó que en materia agrícola el frío es benéfico, en virtud de que las bajas temperaturas contribuyen a matar los residuos de las plagas que pudieron presentarse este año y los anteriores; “redunda en que no se gaste dinero en el próximo ciclo primavera-verano para el cultivo de esta estación, además es un tema de cuidado al medio ambiente porque ya no se tiran químicos que dañan a la atmósfera”.
Para el ciclo agrícola de invierno, cuando se cultiva trigo, avena y cebada, además de que tienen poca presencia de hierbas nocivas y de plagas, si los campesinos además siembran maíz pueden tener beneficios con las bajas temperaturas pues al incorporar el rastrojo y dejar barbechada la tierra, se realiza un proceso químico-biológico que ayuda a matar las plagas, a oxigenar la tierra y reditúa en una mejor cosecha en el ciclo primavera-verano del próximo año.
Sufren los más pobres. Roberto Arreola reconoció que es grave la situación para quienes tienen techos débiles y no cuentan con los medios para protegerse del frío, considerando que en el medio rural se han registrado temperaturas por debajo de los cero grados centígrados y el pronóstico indica que habrá frentes fríos que bajarán aún más las temperaturas.
Juan Manuel Cárdenas
El Siglo de Durango
(datos)
En el medio rural del municipio de Durango se registraron precipitaciones en forma de agua-nieve, sobre todo en la región serrana.
Se espera que las bajas temperaturas ayuden a matar los residuos de plagas que afectaron los sembradíos a lo largo del año.
El frío contribuye también a que los campesinos usen lo menos posible los fertilizantes y plaguicidas, que impactan directamente al medio ambiente.
