Campesinos de Sombrerete demandan la instalación de módulos del IFE en las comunidades rurales.
El Siglo de Durango
Sombrerete, Zac.- De nueva cuenta, decenas de campesinos de la tercera edad se quejaron de que deben permanecer muchas horas parados en los corredores de la Presidencia Municipal, esperando para sacar su credencial de elector del Instituto Federal Electoral (IFE).
Desde las 8:00 de la mañana arribaron los campesinos de diversas comunidades del municipio, unos con lonche y otros sin nada; sólo con el deseo de tomarse la foto y regresar de nuevo al hogar. En virtud de esta situación, piden oficinas del IFE en Sombrerete, para no tener que trasladarse de sus comunidades a la ciudad.
Amas de casa con sus pequeños descansan en bancas ubicadas fuera de la Dirección de Comunicación Social, pero la enorme fila se extiende a lo largo de los pasillos y da vuelta.
CANSANCIO
Muchos no aguantan el cansancio, ya que deben esperar de las 8:00 a las 11:00 horas, que es cuando llega el personal del IFE y se atreven a descansar en el suelo.
Muchos más permanecen de pie, pero encargan sus lugares a otras personas y deciden irse a donde los aguarda una banca o de plano a sentarse a las escaleras de la Presidencia o del Jardín Constitución por un momento.
LENTA ESPERA
Dentro de las oficinas la espera es lenta; los trámites para tomarse la foto son tediosos. Se van anotando todos los datos y al final el personal va sentando a las personas para tomarles la fotografía una por una.
A veces, las personas se desesperan ya que la fila no avanza y muchos acuden a comprar un refresco o un pastelillo para comer y mitigar un poco el hambre voraz que los aqueja.
Otros prefieren soplarse con sus sombreros, ya que vienen desde comunidades alejadas como Corrales. Margarito Canales Flores es de los últimos de la hilera y señala que no sabe si alcanzará a tomarse la foto, ya que su autobús lo va a dejar, pues sale a las 3:00 de la tarde.
“No sé cuántos días va estar el módulo (del IFE) en Sombrerete, pero voy a regresar cuando vuelva a juntar mi dinerito, ya que me vine en el autobús”, señala.