Aunque mucho se ha hablado de la urgencia y necesidad de organización en el sector campesino para que sean directamente los productores quienes comercialicen el frijol, esto no se ha llevado a la práctica.
CAMPO
Productores se niegan a ser víctimas del “coyotaje”; argumentan que la calidad del producto es buena y por ello el precio se debe mantener.
Poanas, Durango.- El problema de comercialización de frijol se presenta año con año, pero los campesinos no están dispuestos a malbaratar su producto; por esa razón piden el respaldo a las autoridades estatales y federales para que se efectúen esquemas de comercialización justos.
“Los campesinos sabemos producir pero no comercializar”, comentó Jesús Rivera Gallardo, representante del Comité Municipal Campesino de Poanas, tras admitir que el problema de comercialización se presenta como parte de un círculo vicioso porque los productores no se organizan, pero sostuvo que la calidad del frijol es buena, razón por la que no permitirán ser presas del “coyotaje”.
El precio base de la comercialización de frijol inició a 11 pesos el kilo, mientras que el año pasado fue de siete pesos el Pinto Saltillo, y 5.50 para las demás variedades.
Postura. El líder cenecista argumentó que la calidad del producto no justifica que éste baje significativamente su precio, tras expresar que el frijol se seguirá ofertando entre los diez y 11 pesos; en ese sentido insistió en exhortar a las autoridades competentes tanto estatales como federales para que el precio que se induzca no sea por debajo de la cantidad ya mencionada.
Asimismo, dijo que luego de la pérdida de alrededor del 70 por ciento de la producción de frijol en este municipio es que no se puede dejar que el campesino siga perdiendo; por ello los frijoleros de Poanas se niegan a bajar drásticamente el precio de la semilla.
Se necesita el apoyo de las autoridades para poder establecer el esquema de comercialización a seguir, “si éste se diera a conocer (la información del esquema de comercialización) de manera oportuna nos podríamos organizar mejor”, insistió, tras advertir que si se trabajara de esta manera los productores de frijol contarían con más certidumbre.
En cuanto a las acopiadoras, aceptó que debido a la mala organización que prevalece en el sector campesino no han logrado dirigir alguna acopiadora, por lo que los “coyotes” aprovechan esa situación para presionarlos y así bajar el precio de frijol.
CIFRAS
18,000 Hectáreas fueron en las que se sembró frijol en este año en el municipio de Poanas.
4,500 Toneladas de frijol fueron las que se lograron en Poanas, manifestó Jesús Rivera Gallardo.
600 Toneladas de frijol, aproximadamente, son las que se han vendido hasta la fecha.