Capturan al asesino de mujer

Investigaciones realiza­das por el agente del Ministerio Público, Al­berto de León, con apoyo de la Policía Ministerial lograron identificar al pre­sunto homicida de Ma­ría Verónica Acosta Apa­ricio, hechos ocurridos la madrugada del domingo.

La confesión

Durante el domingo, con las primeras averiguaciones hechas en la colonia Cerro de la Cruz, donde fue baleada María Veró­nica, de 33 años, al presen­ciar el baile de la Santa Cruz organizado por vecinos de dicha colonia, las sospechas apuntaron hacia la pareja sentimental de la fallecida.

Testigos del lamentable hecho, comentaron a los agentes ministeriales, que al realizarse el baile, observaron a Cruz y la hoy occisa discutir, y que de pronto éste saco el ar­ma y disparó contra ella.

Sin embargo, ante la detención de Cruz, de 30 años, este dijo al agente De León, que cuando se encontraban en el baile, observó que dos personas con las que tiene viejas rencillas se dirigían hacia ellos, y que al accionar el arma contra esas personas, ésta se accionó contra María Verónica.

La versión de los testigos no coincide con la versión que el homicida confesó, alegó ante el agente De León. Por otra parte las pruebas periciales realizadas indican que el tiro que presuntamente se le escapó a Cruz no fue disparado de manera accidental. Aunque la de balística coincide un tanto con lo que el presunto inculpado dijo en su declaración ministerial.

El arma homicida

Luego de que se creía que sería una bala perdida la que le arrebatara la vida a María Verónica, el Ministerio Público logró recuperar el arma homicida, un revólver, calibre 38 especial, con capacidad para cinco cartuchos, pero que sólo tenía dos tiros hábiles y uno percutido.

El pasado

Cruz y la hoy occisa, vivían en unión libre. Ella estaba separada de su marido y al parecer ya te­nía problemas con Cruz. Aunque dicha versión no se ha confirmado.

María Verónica falleció al ingresar a Cruz Roja, la madrugada del do­min­go al recibir un balazo de­trás de la oreja derecha.