Piratas secuestraron cerca de Somalia un buque tanque químico filipino con 23 tripulantes a bordo, lo que eleva a 83 el número de ataques en aguas del país africano este año, dijo un funcionario marítimo el martes.
El barco se dirigía a Asia el lunes cuando fue capturado en el Golfo de Adén por piratas armados con armas automáticas y lanzagranadas, dijo Noel Choong, que encabeza el centro de reporte de piratería del Buró Marítimo Internacional, en Kuala Lumpur.
Dijo que ese mismo día hubo un intento de ataque a un buque de carga en el oriente de Somalia, pero ese barco consiguió escapar con maniobras evasivas. El buque navega bajo bandera saudita, pero es operado desde Gran Bretaña.
El buró ha emitido una advertencia urgente a buques que tomen medidas adicionales para evitar a los piratas, incluso cuando naveguen en un corredor del golfo patrullado por una fuerza naval multinacional.
"El corredor está protegido, pero el paso seguro no está 100% garantizado. Las embarcaciones de patrulla no pueden estar en todas partes al mismo tiempo. El buque que transite las aguas debe observar constantemente el radar para detectar piratas", dijo Choong.
Muchos barcos han conseguido evitar ataques tras pedir ayuda de las fuerzas multinacionales, añadió.
La OTAN ha enviado tres buques al Golfo de Adén, una de las más transitadas rutas navieras en el mundo, para ayudar a la armada estadounidense en las patrullas antipiratas y escoltar a buques de carga.
La Unión Europea ha dicho que al menos cuatro barcos apoyados por aviones vana comenzar a patrullar las peligrosas aguas en diciembre. La flotilla de la UE eventualmente sustituirá a las patrullas de la OTAN.
Pese al incremento de las medidas de seguridad, los ataques han continuado frente a Somalia, que está atrapada en una insurgencia islámica y no tiene gobierno funcional desde 1991.
Este año se han producido 83 ataques piratas en aguas africanas, con 33 buques secuestrados. Doce barcos permanecen en manos de los piratas, además de 200 tripulantes, dijo Choong.