Durango

Carretera de la muerte dos grupos se enfrentaron dejando saldo de ocho sujetos muertos y uno herido

El helicóptero del Gobierno del Estado participó en la búsqueda de los delincuentes.

El helicóptero del Gobierno del Estado participó en la búsqueda de los delincuentes.

El Siglo de Durango

Nombre de Dios, Dgo. Cuerpos despedazados a balazos, granadas regadas al por mayor, cientos de casquillos de alto calibre y una docena de vehículos de lujo abandonados a pie de carretera totalmente balaceados, fue el escenario que se observó en la carretera a México en el tramo de Nombre de Dios-Vicente Guerrero, cuando dos grupos de la delincuencia organizada se enfrentaron dejando saldo de ocho sujetos muertos y uno herido, para después huir con rumbo a Zacatecas.

Personal de El Siglo de Durango estuvo presente en la escena del crimen logrando entrevistar al comandante de la Décima Zona Militar, Moisés Melo García, quien informó que fueron tres puntos específicos donde se dieron los enfrentamientos.

Cuatro horas de balazos.

Vecinos del poblado Nicolás Bravo, cercano al lugar del siniestro, comentaron que como desde la 1:00 de la mañana de ayer se escuchaban rechinar las llantas de los vehículos acompañados de ráfagas de fusiles de alto calibre, siendo a las 4:30 de la mañana cuando se percibió un enfrentamiento más fuerte.

Más de 100 agentes de las diferentes corporaciones estatales y federales arribaron al lugar del enfrentamiento, junto con varias decenas de efectivos del Ejército Mexicano, quienes también hicieron trabajo pericial en el mencionado sitio.

Operativo aéreo.

En plena carretera, a la altura del kilómetro 228 de la citada rúa, aterrizó el helicóptero del Gobierno del Estado de donde descendió Melo García, quien había hecho varios recorridos por la zona y desmintió que en los municipios de Guadalupe Victoria, Villa Unión y Nuevo Ideal se hubieran presentado otros enfrentamientos, “sólo fueron tres puntos donde hubo enfrentamientos y fue en este tramo” –de Nombre de Dios a Vicente Guerrero-, posteriormente subió a la aeronave y continuó el sobrevuelo.

Los cientos de personas que quedaron varadas en la carretera al no permitirles el paso se asombraron cuando el helicóptero aterrizó en media carretera pues justo en ese momento circuló un convoy de ocho camionetas llenas de elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI), quienes se sumaron a la indagatoria con los elementos de la Dirección Estatal de Investigación (DEI) y a la Policía Federal.

Usaron lanzagranadas.

Todo el personal policiaco se dio cita en el mencionado tramo donde se encontraban los 12 vehículos que participaron en el fuego cruzado; localizaron cientos de casquillos percutidos de fusiles AR-15, AK-47, proyectiles al parecer calibre .50 y otros del triple de tamaño de los que usan los “cuerno de chivo”.

Los agentes retuvieron por varias horas a los reporteros en un retén pues en el lugar había varias granadas regadas, algunas sin percutir, y querían evitar riesgos, además se temía que los asesinos estuvieran todavía rondando el lugar.

Fue como hasta el mediodía que los agentes abrieron el paso a los reporteros que desde las 8:00 de la mañana se encontraban tomando datos en el primer retén que implementaron los agentes de la DEI.

Detalle a detalle

En el kilómetro 228+900 se encontraba el primer vehículo abandonado, era un VW, tipo Golf, de color gris, éste presentaba impactos de bala en la parte posterior y del lado del chofer, apreciándosele las llantas ponchadas.

Tres kilómetros más adelante, como a 15 metros fuera de la cinta asfáltica, estaba una camioneta blindada Ford, de la línea Lobo, de color negro con impactos en la parte trasera y en el costado izquierdo.

Después de avanzar dos kilómetros sobre la carretera se encontraba otra unidad Dodge, tipo Durango, de color blanco, con orificios producidos por armas de fugo en la parte frontal, dentro de la camioneta había varios casquillos percutidos presumiéndose que desde adentro respondieron a la agresión.

A seis metros de la Durango estaba otra camioneta Lobo de la línea King Ranch, también blindada, de color negro, a esta se le apreciaban orificios de gran magnitud, de armas más poderosas que los “cuernos de chivo”.

Un poco más adelante, se observaba un vehículo Lincoln, tipo Navigator, que también fue asegurado por la autoridad pero éste no presentaba ningún impacto de bala.

Finalmente, como a siete kilómetros del primero vehículo mencionado estaban dos camionetas, una Voyager guinda y una Jeep de color gris donde había varios casquillos calibre .50., las otras cuatro unidades que aseguró la Procuraduría se localizaron en caminos de terracería aledaños a la citada rúa.

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