Especialistas del Cenapred colocarán un sismógrafo en la región de Las Quebradas.
El Siglo de Durango
Un geólogo y un ingeniero sísmico del Cenapred arribarán hoy a Durango y mañana se trasladarán a las comunidades de Tamazula que sufren de movimientos telúricos y explosiones con cierta periodicidad desde febrero pasado.
La Unidad Estatal de Protección Civil asegura que la población de Coluta, Tamazula, y El Platanar, en Topia, no se encuentra en peligro e insiste en que es prácticamente imposible que esté naciendo un volcán.
Los especialistas sólo permanecerán en la zona afectada durante un día e instalarán un sismógrafo del que obtendrán información semanalmente. Lo anterior fue dado a conocer por Gerardo Cajero Navarro, titular de la Unidad.
Testifica que lo que han comentado los expertos del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) es que muy probablemente el fenómeno que se vive en la zona de Las Quebradas sea similar al ocurrido en El Salado, en Sinaloa, denominado “enjambre sísmico”, originado por el reacomodo de las placas geológicas que no representa riesgo alguno.
DEDUCCIONES
Cajero Navarro adelanta que mañana se hará un recorrido con la gente del Cenapred para instalar el sismógrafo y el primer reporte quizá se tenga en la siguiente semana.
Esta casa editora dio a conocer el panorama de preocupación que prevalece en los poblados de Tamazula ya que las explosiones recurrentes han ocasionado daños en las viviendas y el desprendimiento de algunas rocas de los cerros. Pero el entrevistado descarta cualquier contingencia.
“La semana pasada nos habló el Presidente Municipal, que se había desgajado un cerro, mentira, sí rodaron algunas piedras pero no se puso en peligro a ninguno de los pobladores ni afectaron ninguna casa”, especifica.
El servidor público determina que existe una psicosis por los temblores y con cualquier movimiento que se sienta, las personas se ponen muy nerviosas.
Sobre las exhalaciones de vapor, agrega, se sabe que en esa región y hasta Culiacán, Sinaloa, hay agua sulfurosa que incluso es aprovechada para algunos balnearios.
TESTIMONIOS
Habitantes de la zona de Las Quebradas hablaron con El Siglo de Durango y dieron a conocer que:
-El jueves 10 de abril se registraron ocho detonaciones seguidas de temblores.
-El vapor que sale de orificios en el suelo tiene hasta una altura de 15 metros.
-La población se encuentra nerviosa y con mucho temor ante los movimientos de la tierra.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.
