Las lluvias permiten el ahorro de agua rodada y de los pozos destinadas a los plantíos del picante.
Poanas, Dgo.- De una superficie de dos mil hectáreas sembradas de chile, mil 200 han sido apoyadas para la aplicación de fungicidas para evitar daños por la humedad y plagas en las plantas, mientras tanto las lluvias han permitido el ahorro del agua rodada y de pozos que se utiliza para regar este cultivo.
Mientras tanto, se espera que para mediados de agosto ya haya comercialización del chile verde producido en Poanas, según comentó Jesús Rivera Gallardo, titular del Comité Municipal Campesino y regidor de este municipio.
La siembra del picante se llevó a cabo entre marzo y abril, mientras que para mediados de agosto, ya habrá chile verde y de ahí iniciará el proceso de cosecha para su venta y secado, tanto de chile ancho como pulla.
Al referiste a las lluvias, el entrevistado dijo que las que se han presentado a últimas fechas han servido para ahorrar el agua que se extrae de la presa y pozos.
Dijo que el vital líquido sólo afecta al producto cuando hay anegamientos, pues el exceso de humedad merma la calidad o lo destruye.
El chile de Poanas es reconocido por su calidad y para lograr que esta sea siempre la misma, con apoyo del Comité Estatal de Sanidad Vegetal del Estado de Durango (Cesavedac), se aplicó fungicida a una superficie de mil 200 hectáreas, en beneficio de 550 productores, con una inversión aproximada de 400 mil pesos.
Daniel Estrada Ortiz
El Siglo de Durango
Cifras
El cultivo de picante ha sido una actividad que por años ha sido rentable para los agricultores del Valle de Poanas.
tonelada de chile seco por hectárea cultivada es una producción de regular beneficio económico.
550
productores fueron beneficiados con la aplicación de fungicida a sus parcelas para evitar plagas.
