Para la Dirección Municipal de Cultura, liderada por Gabriela Nava, el balance en el año que termina es positivo. (Fotografías de Érick Sotomayor)
Fortaleciendo los programas especiales de iniciación artística en las colonias con alto riesgo de marginación, la Dirección Municipal de Cultura termina un año en el que la presencia y el apoyo con las redes e instituciones culturales que trabajan diariamente en La Laguna, ha dejado un balance positivo... una presencia que en muchas ocasiones pasa desapercibida, pero que finalmente es fundamental para que estos proyectos salgan adelante.
Para Gabriela Nava, una de las funciones principales que tiene el departamento a su cargo, es el apoyo que le brinda a instituciones culturales laguneras como la Camerata de Coahuila, el Museo Arocena, la Banda Salvador Jalife, el Museo Regional de La Laguna, la Escuela de Música Santa Cecilia, el Teatro Isauro Martínez y el Teatro Mayrán, entre otros. Además agregó que por lo menos el 95 por ciento de los creadores que han solicitado algún apoyo se le ha atendido de manera favorable.
¿Cómo fue el balance de este 2008?
Obviamente esta ciudad te plantea muchos retos y no es fácil por el crecimiento que va teniendo; el trabajo de la cultura es inacabable, eso hace que se vayan haciendo los ajustes para dar servicio en la medida de lo que es posible. Aún cuando por sobre todas la circunstancias que uno pueda enfrentar, hay resultados”.
¿La iniciación artística con los niños de las colonias marginales sigue como uno de los pilares de la DMC?
Sí, actualmente trabajamos este programa con 250 niños pero en sus localidades, en sus barrios. Por la necesidad que hay en este tipo de colonias decidimos llevar los programas a ellos, porque para ellos económicamente no les es fácil los traslados, ni el pago de una cuota para pagar un maestro.
¿Financiarte incluyó una nueva categoría?
Para este año nos asociamos con el Instituto Municipal de Cultura de Gómez Palacio, e incluimos la categoría de Formación Artística, en donde niños presentaron avances muy grandes como el caso de Pamela Mireles y de Ruth A. Mesta, que son dos niñas de la Escuela de Música Santa Cecilia, quienes ahora están tomando clases con el concertino de la Camerata y otra integrante de la orquesta lagunera.
¿El Museo del Algodón es un logro enmedio de la polémica?
Para nosotros ha sido algo muy importante por muchos motivos; para nosotros los espacios de la Comarca cuentan parte de la historia. Después de salir del museo no hay quien no salga enamorado de la ciudad, los valores que transmite el museo son muy regionales. Siempre por el sector va a haber polémica; el museo esta recibiendo visitas de todo tipo, desde hace tiempo hemos estado abriendo espacios en diferentes lugares para quitarnos esa retórica de que la cultura es para cierto sector y no, la cultura es para todos, por eso el Museo del Algodón está donde está.
¿Proyectos para el año que entra?
Más que nada tratar de mantener los que ya tenemos, continuar con la presencia de los programas de iniciación en los sectores desprotegidos y cerrar los ciclos, es decir terminar con las cosas que hacen parte de un programa, llevarlos a su fin.
