Madres de familia de varias escuelas cerraron pacíficamente la Subsecretaría de Educación, para presionar a los responsables a atender las necesidades en los planteles.
Madres de familia impiden acceso al inmueble; denuncian falta de soluciones a demandas hechas
Por la negligencia que dicen haber recibido como única respuesta de la autoridad educativa a infinidad de demandas, madres de familia de diversas escuelas primarias cerraron las oficinas de la Subsecretaría de Educación por más de una hora.
Las inconformes llevaron cadena y candado para impedir el acceso al inmueble, acción que dijeron es producto del cansancio y desesperación que les provoca la falta de soluciones, que afectan directamente a los niños y las niñas en su proceso de aprendizaje.
Sin embargo, el subsecretario de Educación en la Región Lagunera de Durango, Gerardo de Lira Cabral, negó que se hayan ignorado las peticiones de las sociedades de padres de familia y aseguró que éstas se encuentran en proceso de atención.
El funcionario salió de sus oficinas para dialogar con las inconformes y pedirles que reabrieran las instalaciones, a cambio de atender a una comisión conformada por representantes de cada uno de los planteles.
Aseguró que en cada uno de los casos se actuaría de inmediato, aunque justificó la inacción porque dijo, en algunas propuestas se requiere de aplicación de recursos que por ahora no se tienen.
Cuestionó el proceder de las madres de familia, pues consideró que el cierre de oficinas no es la mejor forma de iniciar un diálogo.
El contingente era encabezado por la vicepresidenta de la Asociación Estatal de Padres de Familia, Guadalupe Vallejo, quien advirtió con recurrir a otras acciones como el cierre de la circulación por el bulevar Miguel Alemán, en caso de no tener una respuesta inmediata del subsecretario, Gerardo de Lira Cabral.
Y es que desde que inició el ciclo escolar, las fallas y necesidades se fueron acumulando hasta que en uno de los casos expuestos, está de por medio la seguridad y la propia vida de los escolares.
Se trata de la primaria 18 de Marzo de la zona Centro, donde ya se ha registrado un incendio y dos conatos de conflagración por el mal funcionamiento de las redes eléctricas, obra que ha quedado fuera de toda supervisión y que por lo tanto, representa una bomba de tiempo para alumnos y maestros.
Las madres de familia dijeron que desde el año pasado, el contratista encargado de la sustitución de la línea eléctrica dejó incompleto el trabajo, por lo que hay cables sueltos y con frecuencia se registran fallas por la sobrecarga de energía, y hasta los equipos de cómputo presentan fallas y las hojas se queman al momento de imprimir.
Señalaron que cuando se registró el incendio en una de las aulas, los alumnos se encontraban en honores a la bandera, “de lo contrario hubiera sido un desastre”.
Al contratista, Adolfo Martínez Borjas, se le entregaron más de 400 mil pesos producto de las aportaciones de los padres de familia, pero “al parecer lo protegen porque es compadre del encargado de supervisión de obras de la Subsecretaría (Andrés Madrid Escobedo)”.
Peticiones de asignación de maestros a grupos que desde el inicio de ciclo no lo tienen; intendentes para el aseo de sanitarios e investigación a ex directores por presuntos actos de corrupción, se sumaron a la lista de reclamos.