AMANECE PARA EL CABALLERO DE LA NOCHE
Calificación: 4 estrellas y media de 5
Quiero advertirle que la nueva película de Batman, el Caballero de la Noche, dista mucho de ser una película para niños. Y no porque pudieran traumarse con sus representaciones de violencia (nunca abiertamente sanguinolenta) sino por ser una cinta verbosa que depende, además, tanto de un afinado sentido de lo trágico como de una visión más amplia del bien y el mal para disfrutarse... ninguna de las dos cosas se les da bien a nuestros revoltosos amiguitos.
Y en lo que a la acción respecta, aunque hay suficiente a lo largo de la trama, difícilmente es el atractivo principal de la cinta. De hecho, salvo una muy emocionante persecución que involucra un trailer, un camión de transporte bancario y la batimoto, apenas recuerdo las secuencias de acción. Pero los dilemas morales que plantea por la vía del Guasón, vaya que son memorables.
A veces parece que Christopher Nolan, el director, transita por las obligadas secuencias de patadas y persecución casi con premura, a fin de llegar a los conflictos éticos que golpean como carambola de tres bandas con los personajes de Batman, el Guasón y Harvey Dent, el fiscal de distrito con estrella ascendente en ciudad Gótica. En este triángulo, el maniático de la cara pintada es la hipotenusa desquiciante, que busca (y logra) atraer a los catetos que representan a dos facetas del bien: la legalidad y el vigilantismo (que cuando lo practica más de uno se llama linchamiento).
Respecto a la actuación del fallecido Heath Ledger: todo lo bueno que se ha dicho es cierto. Su Guasón es impresionante. Un nihilista sádico cuya crueldad supera por mucho a su humorismo. Es posible que la caricaturesca y exuberante creación de Nicholson en el Batman del 89 siga siendo superior en la parte histriónica, pero el Guasón de Ledger habita un mundo más real, más carnoso; y debido a su absoluta falta de glamour, termina por ser un retrato más creíble de sociópata. El nuevo Guasón, por su forma sistemática de socavar a las autoridades, parece más inteligente y peligroso.
Esto nos lleva a la inevitable comparación: ¿Es la nueva cinta mejor que la de Tim Burton? Si su referencia son las cintas de superhéroes, la respuesta es sí. Si su referencia es el cine universal, la respuesta es no.
El trabajo de Burton se aleja del realismo (y el realismo es lo que nos gusta del nuevo Caballero de la Noche), porque no lo necesita. Su intención es crear una realidad paralela, un universo propio. El trabajo de Nolan busca mantener un pie en el mundo real, aunque hacia el final de la película anterior, Batman Inicia, saliera disparado por la tangente.
Contesto así a la segunda pregunta ¿Es mejor que Batman Inicia? Sí. Por mucho.
La historia de Harvey Dent, quién representa la dignidad valiente frente a la ilegalidad rampante, es la que al final resuena en mi mente. Es el excelente trabajo de Aaron Eckhart, que pese al riesgo de ser opacado por quienes portan disfraces y pintura, logra quedarse con el mayor impacto emotivo. Es un trágico recordatorio de la inevitable derrota del ciudadano decente que aspiramos a ser, frente a la corrupción y el miedo que permean Ciudad Gótica, México.
mrivera@solucionesenvideo.com