Un total de 105 millones de personas se han visto afectadas por las peores tormentas de hielo y nieve que vive China desde hace 50 años, y que han provocado al menos 64 muertos y escasez de alimentos en algunas zonas. Las extremas condiciones meteorológicas han cortado el suministro eléctrico en numerosas partes del país y han interrumpido gravemente el transporte ferroviario en el peor momento en que podían haber ocurrido, cuando unos 180 millones de chinos se disponen a regresar a sus casas para pasar el Año Nuevo Lunar la semana que viene.
La situación es tan seria que las autoridades han tomado la rara iniciativa de pedir a los inmigrantes que renuncien al viaje, aún sabiendo que para la mayoría se trata de la única ocasión en que pueden ir ver a sus familias tras un año de duro trabajo y privaciones. También han advertido que las cosechas de invierno se verán reducidas, lo que podría empeorar el problema del alza de precios de los alimentos y de inflación que vive China.
El Gobierno ha enviado 450 mil soldados y paramilitares para despejar la nieve y ayudar a quienes se han visto atrapados. Además, ha desplegado un millón de policías en las autopistas congeladas y las estaciones ferroviarias, ante el miedo a que se produzcan disturbios. Según la prensa local, casi 150 mil viviendas han resultado destruidas y más de 2.5 millones de personas han sido evacuadas o van a serlo.
El primer ministro, Wen Jiabao, se ha desplazado a la provincia central de Hunan -una de las más afectadas- para inspeccionar la zona y a la de Guangdong, donde trabajan millones de inmigrantes de todo el país.
Diecisiete de las 31 provincias y ciudades con categoría de provincia se han visto afectadas por los cortes de suministro eléctrico, en un momento en el que frío ha disparado el consumo y muchos transportes de carbón -fuente del 70% de la producción energética- no han podido llegar a su destino. En Pekín, sin embargo, la nieve sólo ha hecho una breve aparición este año, aunque las temperaturas son mucho más bajas que el invierno pasado. La Administración Meteorológica China ha asegurado que las malas condiciones seguirán los próximos días.
Declara Ecuador emergencia en zonas afectadas por lluvia
El Gobierno de Ecuador declarará en emergencia las zonas afectas por los desbordamientos de ríos e inundaciones ocasionadas por las lluvias en los últimos días, aseguró ayer el presidente ecuatoriano, Rafael Correa.
Tras una reunión con los ministros de su Gabinete implicados en la emergencia, Correa viajó en helicóptero a Guayas, la provincia más afectada por las inundaciones y riadas, donde el aparato tomó tierra en la localidad de El Triunfo, para reunirse con el prefecto de la provincia, Nicolás Lapentti, y evaluar la situación y las necesidades.
El ministro de Agricultura, Walter Poveda, dijo que en una evaluación previa, se determinó que entre 15 mil y 20 mil hectáreas de cultivos permanentes y de ciclo corto fueron afectadas por las lluvias y los desbordamientos de los ríos. Por su parte, la Comisión de Estudios para el Desarrollo de la Cuenca del Río Guayas y la Península de Santa Elena (CEDEGE), señaló que, según sus cálculos iniciales, se necesitarán 6.8 millones de dólares para rehabilitar los daños causados por las riadas e inundaciones. Aunque la más perjudicada por los efectos de las lluvias es la provincia de Guayas, otras siete, la mayoría del litoral, también están afectadas y han sufrido pérdidas en cultivos y daños en carreteras e infraestructuras eléctricas y tendidos telefónicos.
El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI) de Ecuador ha señalado que las lluvias en el país durante este mes de enero han sido más abundantes que en el mismo periodo de los nueve años anteriores, aunque se encuentran dentro de las cantidades normales.
