La Internet se ha convertido en una excelente herramienta para comerciar, pero hay que tomar sus precauciones para evitar fraudes.
Antes de hacer cualquier transacción por Internet, la Profeco recomienda informarse bien.
Las páginas de Internet presentan una amplia gama de posibilidades para adquirir bienes o servicios en diversas partes del mundo, por lo que pueden resultar atractivas ante la facilidad para realizar las compras, sin embargo, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) hace algunas recomendaciones para un comercio seguro.
La Profeco señala que saber un poco más sobre comercio electrónico permitirá al ciudadano estar mejor informado para decidir la elección de compra que le sea más favorable y evitar ser víctima de prácticas comerciales fraudulentas. Lo primero es asegurarse de que el proveedor cuente con mecanismos que brinden seguridad y confidencialidad a la información que el consumidor proporcione.
El proveedor debe proporcionar su domicilio físico, números telefónicos y demás medios a los que pueda acudir la persona para presentarle sus reclamaciones; debe informar claramente su identidad, denominación legal y datos de ubicación física tales como su dirección, teléfono y fax en caso de que se presente un problema.
El consumidor tendrá derecho a conocer la información sobre los términos, condiciones, costos, cargos adicionales y forma de pago de los bienes y servicios proporcionados por el proveedor.
El proveedor de bienes y servicios está obligado a brindar al consumidor una descripción veraz de las características de los productos a fin de que el consumidor pueda tomar una decisión de compra bien informada. También se debe especificar cuáles son las políticas de devolución de mercancías así como las garantías, las condiciones generales de la transacción, restricciones para la compra de bienes y servicios como es el caso de ubicación geográfica, de tiempo, por tipo de producto o cantidad a adquirir.
De acuerdo con la Profeco, en México las compras por Internet se concentran principalmente en aparatos electrónicos, software, libros, boletos de avión, reservaciones, CD’s y DVD’s. Las compañías han comenzado a utilizar Internet como un canal de ventas, sustituyendo las visitas personales, correo y teléfono por pedidos electrónicos, ya que gestionar un pedido por Internet cuesta menos que hacerlo por vías tradicionales.
Para evitar ser sorprendido, es necesario conocer al proveedor en línea. Las operaciones comerciales por medios electrónicos en la República Mexicana se encuentran reguladas por la Ley Federal de Protección al Consumidor, por lo que el ciudadano debe tomar en cuenta que no está solo, ya que también existen lineamientos internacionales que amplían su protección.
Lo que hay que considerar
La Profeco recomienda verificar que el sitio en que se pretende comprar ofrezca información clara sobre las siguientes cuestiones.
-El proveedor debe informar claramente su identidad, denominación legal y datos de ubicación física tales como su dirección, teléfono y fax para que pueda hacer alguna reclamación en caso de que se presente un problema. También es importante el nombre o marca de comercialización de la empresa y sus productos.
-El proveedor de bienes y servicios por Internet está obligado a brindar al ciberconsumidor una descripción veraz de las características de los productos a fin de que el consumidor pueda tomar una decisión de compra bien informada.
-En cuanto a los precios, éstos deben estar expresados en moneda nacional y, en caso de existir cargos adicionales por envío de los productos, éstos deben señalarse claramente. Las condiciones y formas de pago también deben especificarse.
-Es deseable que el portal en el que se realizan las compras cuente con políticas de privacidad, sobre todo cuando la transacción implica dar a conocer algunos datos de carácter privado como el número de tarjeta de crédito.
-Es importante que el portal especifique, de manera clara, cuáles son las políticas de devolución de mercancías así como las garantías, las condiciones generales de la transacción, restricciones para la compra de bienes y servicios como es el caso de ubicación geográfica, de tiempo, por tipo de producto o cantidad a adquirir.
FUENTE: Profeco
