La obra, realizada como parte del Festival de las Artes Coahuila 2008, registró una excelente entrada.
Rafael Inclán demostró anoche por qué su caracterización de “Harpagón” le ha dado tantas satisfacciones desde 1991. Este sábado ocho de noviembre se presentó la puesta en escena El Avaro, en el Teatro Isauro Martínez ante más de 500 laguneros, como parte del Festival de las Artes Coahuila 2008, que dio inicio desde el día primero de este mes.
El elenco, que encabezó Rafael, ofreció una magistral actuación durante la función que inició a las 8:10 de la noche de este clásico de Jean-Baptiste Poquelin Moliere, que este 2008 cumplió 340 años de su primera representación en 1668 en el teatro Palais-Royal de París.
Inclán, dejó a un lado sus famosas caracterizaciones de “El Mofles” o “El Chácharas” para mostrar su lado dramático, aunque también estuvo presente el toque de comicidad. Con esto, el actor dejó muy en claro que el teatro clásico no está peleado con la diversión, y es que a los textos de Moliere le agregó algunos segmentos cómicos.
El Avaro está dirigido por José Solé, bajo la producción de Irene Sabido y la adaptación de Miguel Sabido, quien le dio a Inclán la oportunidad de protagonizar la pieza por recomendación de Ignacio López Tarso.
La puesta en escena cuenta la vida de “Harpagón”, un rico y avaro personaje -que acá en México se le conoce como codo en el lenguaje popular- que toma la decisión de casarse con una chica, con el firme propósito de obtener un gran dote. Al final termina solo y con todo el dinero, que en realidad es su único amor.
En la trama, sus hijos sufren por la incomprensión y tacañería del padre, ya que aún estando enamorados, tienen el temor de cumplir sus deseos de matrimonio y enfrentarse así al mal genio de su padre.
En este trabajo teatral se abordan temas como la avaricia, la tiranía doméstica y el egoísmo.
Rafael Inclán, quien cumple 40 años de carrera artística, ha dicho en varias ocasiones que la historia del montaje está más vigente que nunca, sobre todo en el medio político.