El martes pasado se llevó a cabo una serie de conferencias sobre osteoporosis, en la que participó la reconocida actriz Diana Bracho.
Más de mil mujeres de la Comarca Lagunera tuvieron la oportunidad de participar en el curso-taller Mujer Madura, Amor Maduro, en el cual se fomentó la prevención de la osteoporosis y se habló de los cuidados que el sexo femenino debe tener en la etapa de la madurez.
Este evento se llevó a cabo el martes 23 de septiembre en el Teatro Nazas a partir de las 6:00 de la tarde y fue organizado por Laboratorios y Espacio Roche teniendo como ponentes a los doctores Raúl Domínguez, Ana Gabriela García, Deborah Legorreta, Lourdes Morato y a la primera actriz Diana Bracho.
Domínguez y Morato fueron los encargados de comunicar a las asistentes las formas sobre cómo prevenir y tratar la terrible enfermedad de la osteoporosis. Así mismo, con el objetivo de ofrecer un tema de interés relacionado a una buena calidad de vida, Legorreta abordó las diferencias y ventajas que tienen las féminas en el tema del amor de pareja a partir de los 50 años.
Otro de los temas que se trataron fueron los cambios físicos y las enfermedades propias durante el climaterio, donde se incluye la osteoporosis. Al respecto, Raúl señaló que hay infinidad de mujeres que padecen este mal y no lo saben.
“Actualmente 1.3 millones de mujeres en México tiene osteoporosis y ocho de cada 10 mayores de 50 años que la padecen no están enteradas”, dijo el reconocido doctor, mientras que Lourdes agregó que ya se cuenta con un medicamento muy eficaz para combatir la enfermedad, “Roche cuenta en México con el medicamento Bonviva que, además de innovador, ha demostrado una alta eficacia en el tratamiento de esta enfermedad. Se toma una sola vez al mes y, además de reducir el riesgo de fracturas, ayuda a regenerar y aumentar la densidad mineral ósea”.
Como parte de este curso-taller, además de conocer el punto de vista de expertos en ginecología y psicología, se contó con la participación de Diana Bracho con una lectura titulada Cartas de Amor, en la que se refleja la necesidad de amor de una mujer.
Cuando Diana salió al escenario del Nazas, de inmediato cautivó a las espectadoras con su sencillez y porte. “No vengo como Gabriela Elizondo, sino como Diana Bracho para que no me vayan a aventar jitomatazos”.
Todas las laguneros que acudieron se fueron bastante contentas, pues recibieron descuentos en densitometrías óseas centrales de columna y cadera en el hospital Ángeles Torreón.