Javier Lozano Alarcón. (El Universal)
México confía en que el próximo presidente de Estados Unidos, sea Barak Obama o John McCain, “revisará la actual política migratoria” y reconocerá que la mano de obra inmigrante, sobre todo la mexicana, está calificada y es necesaria para la economía de ese país.
Así lo afirmó ayer el secretario de Trabajo de México, Javier Lozano Alarcón, quien participó hoy en la conferencia anual de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que se celebra en Ginebra.
Para el titular de Trabajo, la promesa de los candidatos presidenciales de que habrá un mayor control de la inmigración corresponde a “expresiones comprensibles en tiempos de campaña”, pero confió en que una vez concluida la carrera electoral “vendrán tiempos de reflexión y de revisión” de la política migratoria.
Recordó que cuando el ex presidente Bill Clinton era candidato se pronunció en contra del Tratado de Libre Comercio con México, que fue negociado por la Administración anterior.
Sin embargo, cuando asumió la presidencia apoyó decididamente ese acuerdo.
“Esa misma conciencia llevará a un mejor entendimiento con el próximo presidente de EU, a un mayor respeto de los derechos humanos de los inmigrantes y a un reconocimiento de que seguirán necesitando mano de obra”, recalcó en una reunión con periodistas.
Dijo que ejemplos de ello son Canadá y España, “que parten de la base de que necesitan a nuestros trabajadores, por lo que en lugar de expulsarlos o darles un trato vejatorio, les ofrecen oportunidades de desarrollo”.
Sin embargo, Lozano reconoció que un cambio de actitud por parte de EU “no sólo dependerá de la voluntad del presidente, pues el Congreso es muy activo en este tema”.
