El Congreso de la Unión contempla modificar el formato del Informe Presidencial durante el próximo periodo extraordinario de sesiones que está programado para el 16 de junio, de modo que la nueva modalidad pueda aplicar a partir de este septiembre.
Antes de ser relevado de la coordinación de la facción panista en el Senado, Santiago Creel, aclaró que aún no se define el nuevo formato, pero dio como un hecho una reforma constitucional al respecto.
Entre las opciones están que el presidente entregue el informe por escrito o que entable un diálogo con legisladores seleccionados por los grupos parlamentarios que le puedan cuestionar acciones de gobierno.
Creel reconoció que el actual formato es “viejo y obsoleto”. Si la reforma constitucional es aprobada en junio por dos terceras partes de las cámaras de diputados y senadores, en julio y agosto se turnaría a los congresos locales, pues se requiere la aprobación de 17 de ellos.
La necesidad de cambiar el formato del Informe surgió desde 2006, cuando el entonces Presidente Vicente Fox no pudo rendir su último Informe ante una tribuna tomada por diputados del PRD. El año pasado, el Presidente Felipe Calderón sólo pudo entregar el documento de su primer Informe, para dar un mensaje un día después.
Creel calificó de absurdo vivir con la amenaza constante de la toma de tribuna. “Lo que tenemos que hacer es construir las condiciones para que la política empiece a dar mejores frutos”, dijo.
El coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete, previó que e periodo extraordinario dure sólo seis días. La reforma petrolera no se tocará, por acuerdo de los partidos.
