En la ceremonia del 91 aniversario el Santuario de Fátima, en la región central de Portugal, acudieron hoy miles de peregrinos de todo el mundo.
En la ceremonia del 91 aniversario el Santuario de Fátima, en la región central de Portugal, acudieron hoy miles de peregrinos de todo el mundo.
La Iglesia Católica conmemora todos los años la serie de apariciones de la Virgen de las que dieron testimonio en 1917 tres niños pastores que vivían en las inmediaciones del lugar, Cova da Iría.
Según la tradición católica, durante las apariciones del 13 de mayo, 13 de julio y 13 de octubre de aquel año a los niños Lucía, Jacinta y Francisco les fueron hechas varias 'revelaciones', conocidas como los secretos de Fátima, el último de ellos revelado en el año 2000.
Las revelaciones estaban relacionadas con la muerte prematura de dos de los niños, las dos guerras mundiales, la caída del comunismo, fe católica y el atentado que sufrió el Papa Juan Pablo II en 1981.
El arzobispo de Vilna, Audrys Huozas Backis, alertó hoy de la pérdida de 'raíces cristianas' en Europa y criticó el comunismo que imperó en su país, Lituania, en la misa que conmemoró el 91 aniversario de las apariciones de la Virgen de Fátima.
El arzobispo lituano evocó el clima de 'mentira' y 'miedo' que vivió durante cinco décadas su país bajo régimen comunista y lamentó la guerra, el terrorismo y el hambre que sacuden al mundo.
'Puedo dar testimonio de que cuando se pierde el sentido de Dios, también se pierde el del hombre', señaló en la homilía, en la que sostuvo que Europa 'olvida sus raíces cristianas' y es palco para la defensa de ideologías que van contra el derecho natural.
Las apariciones de Fátima tienen para el arzobispo lituano 'un significado único y profético', que relacionó con una intervención de la Virgen María en la historia del continente europeo para advertir de 'los terribles peligros del comunismo'.
