El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, participa en una conferencia de prensa acompañado por el primer ministro de Eslovenia, Janez Jansa y el presidente de la comisión europea, José Manuel Durao Barroso. (AP)
Amenazan con más sanciones a Irán si prosigue sus actividades nucleares.
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, consiguió ayer el respaldo de la Unión Europea (UE) para exigir a Irán que desmantele su programa nuclear, en una cumbre en la que Cuba y el cambio climático también fueron temas centrales.
La cumbre entre la UE y EU en Brdo, Eslovebia, concluyó con una nueva advertencia a Irán para que ponga fin a su programa nuclear, que el presidente norteamericano, George W. Bush, tildó de “increíblemente peligroso”, bajo la amenaza de sanciones adicionales más duras.
En una rueda de prensa al término de la cumbre, el presidente de EU, George W. Bush, afirmó que “ahora es el momento de que entre todos detengamos el programa nuclear iraní y de dejar claro a las autoridades en Teherán que deben escoger entre el aislamiento o mantener mejores relaciones con nosotros. Un Irán nuclear, sería increíblemente peligroso para la paz mundial”.
El alto representante de la UE para política exterior, Javier Solana, viajará a Teherán la semana próxima para presentar nuevos incentivos a Irán en nombre del “grupo de los seis” (los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad y Alemania).
El consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Stephen Hadley, dijo que, en función de la respuesta que reciba Solana en Teherán, EU y la UE se plantearían aplicar esas medidas más duras.
El comunicado conjunto de la cumbre expresa la voluntad de Washington y Bruselas de colaborar para garantizar que los bancos iraníes “no puedan abusar del sistema bancario internacional para apoyar la proliferación nuclear y el terrorismo”.
Según Hadley, “hemos hablado con bancos y compañías de todo el mundo y les hemos hecho saber los riesgos, en particular si tratan con bancos iraníes, pero también el Gobierno, de que pueden verse implicados con entidades que participan en blanqueo de dinero y movimientos de fondos para la proliferación nuclear y el patrocinio del terrorismo”.
Hasta el momento, Irán, que asegura que su programa nuclear tiene fines pacíficos, sigue adelante con esas actividades, pese a tres resoluciones de la ONU que le imponen sanciones, la mayoría simbólicas.
Bush tiene previsto continuar abordando la cuestión iraní con sus principales aliados europeos durante la gira que desarrolla por el continente, y de la que la cumbre de ayer -la última de su mandato con la UE- fue la primera etapa.
El presidente estadounidense viajó ayer mismo a Alemania, desde donde continuará su periplo hacia Italia, Francia y el Reino Unido. En la cumbre de ayer, los líderes pasaron revista también al cambio climático.
El presidente de turno del Consejo de la UE, el primer ministro esloveno, Janez Jansa, señaló la urgencia de lograr un acuerdo para reducir las emisiones de CO2, para lo que insistió en la importancia de que EU se una al planteamiento europeo.
Bush aseguró que ambos socios lograrán llegar a un acuerdo en este sentido “antes de que expire mi mandato”.
Los socios transatlánticos también abordaron la situación de Cuba al reclamar la libertad “incondicional” de los presos políticos. Bush afirmó que si el Gobierno de Raúl Castro “es diferente” debería demostrarlo poniendo en libertad a esos cautivos.