LESIONES CEREBRALES DIFUSAS
Estimados amigos, las lesiones cerebrales son de los eventos que cuando ocurren en el terreno de juego causan gran polémica, muchas de ellas son subestimadas en una situación en que deben extremarse las medidas preventivas.
La concusión es una lesión bastante común y difícil de reconocer, se considera una alteración del estado mental inducida por un traumatismo, la confusión, amnesia o ausencia de conciencia son signos que la distinguen. En la evaluación del grado de severidad se debe tomar en cuenta la duración de la inconsciencia, la duración de la amnesia postraumática o bien, ambas.
Dentro de la clasificación de los grados de gravedad de la lesión (leve, moderado y grave) existen subclasificaciones, por ejemplo, en el grado leve, en el primer evento se puede permitir su participación en el siguiente partido si se muestra asintomático por un tiempo no menor de 20 minutos. Una segunda concusión en el transcurso de la temporada exige como mínimo una semana asintomático. Se considera asintomático al paciente-jugador sin cefalea (dolor de cabeza), vértigo, desorientación, compromiso de la concentración o alteración de la memoria en el reposo o durante el ejercicio. Una tercera concusión obliga a no dar sintomatología por tres meses.
En el grado dos, un primer evento permite la reintegración en una semana, un segundo exige un mes asintomático y un tercero, una vez controlado, con observación estrecha y previa valoración se permitirá su participación hasta la siguiente temporada.
En el tercer grado (grave), se obliga en un primer evento un mes de reposo y dos semanas asintomático, se extremarán las medidas preventivas en caso de un segundo evento, y si llega a ocurrir una tercera lesión y bajo cualquier circunstancia de competencia si existe alguna anomalía en los estudios (tomografía axial computarizada, o bien resonancia magnética) se termina la temporada.
Evitar la participación está más que justificado por la posibilidad de que el jugador presente situaciones de mayor gravedad como una lesión axónica difusa, que ocasiona una disfunción cerebral más grave, coma traumático prolongado con pérdida de la conciencia durante varias horas, y con frecuencia se pueden observar déficit residuales neurológicos, psicológicos o de la personalidad.
Los grados de concusión se identifican como leve si se observa confusión sin amnesia; el grado II implica confusión más marcada, sin amnesia y sin pérdida de la conciencia; en el grado III se observa pérdida de la conciencia.
En el terreno de juego se evaluará el estado de conciencia, explorar signos neurológicos, dolor de cuello, alteraciones del movimiento y de la sensibilidad, la permeabilidad de la vía aérea, respiración, circulación, de acuerdo a la gravedad se decidirá su traslado a un centro hospitalario. Aun cuando el jugador muestre una buena recuperación es necesaria una nueva evaluación. ¡Hasta la próxima!