Asunto de familia.
Los aspectos económicos políticos y sociales tienen en definitiva un gran impacto en los negocios y son de importancia primordial para los lideres empresariales. Para el 81% de los altos ejecutivos mexicanos, la estabilidad política es uno de los cinco factores que se requieren para incrementar la competitividad del país. la gobernabilidad pública requiere esfuerzos para obtener niveles de competitividad de primer mundo. A veces parece ser que quienes más influyen en la estabilidad política, son quienes mas se empeñan en que suceda todo lo contrario y provocan escándalos que en nada ayudan y mucho perjudican.
Los carretoneros de antes se caracterizaban por su lenguaje peculiar plasmado de palabrotas, ello sellaba con tinta indeleble esa peculiaridad que los distinguía. Las palabras obscenas, malsonantes y de mal gusto siempre han existido, van de la mano del desarrollo de los individuos. Muchas veces, de manera espontánea cuando sucede algo sorpresivo que llama nuestra atención, ello nos hace exclamar alguna de dichas palabrotas; en otras ocasiones, la confianza de estar entre amigos cercanos del mismo sexo nos da la luz verde para salpicar la expresión de nuestras ideas y nuestros sentimientos con palabras obscenas las cuales son escuchadas de manera normal, sin asombrarse, por quienes forman parte del grupo. Se puede afirmar que dichas palabras obscenas o malsonantes tienen un donde, un cuando y un con quien para que su pronunciación, aunque indebida e innecesaria, se comprenda y se tolere sin que nadie se sienta ofendido.
Cuando alguien se expresa de manera indebida y con la intención de ofender a alguien usando palabras soeces, demuestra su falta de educación, su falta de respeto hacia los demás y su poca calidad humana. No es que me asuste el uso de esas palabras ni que sea mojigato en este tema, sin embargo nada justifica su uso cuando hay damas presentes, o cuando nos escuchan menores de edad o personas conocidas o desconocidas a quienes debemos respeto y consideración.
Que a alguien “le gane la emoción” no es razón para que por ello le de por mentar madres e insultar a medio mundo, el gobernador de Jalisco en un intento de lavar su falta, pide disculpas diciendo que “le ganó la emoción”. No es la primera vez que lo hace, en este sentido, Emilio González Márquez se parece mucho a Xóchitl Gálvez quien fuera la encargada de asuntos indígenas en el sexenio de Vicente Fox. Los colaboradores cercanos del gobernador no solo lo toleran, también le festejan su lenguaje vulgar igual que lo hacían quienes trabajaban con Xóchitl, incluso el propio Vicente Fox.
Dijo el gobernador de Jalisco “no suelo hablar así”, pero lo hace; “no es la educación que recibí”, pero si la que demuestra; “no es el ejemplo que quiero dar a mis hijos”, pero se los da y dijo también que “Jalisco no puede tener un gobernador con ese léxico”, pero lo tiene. Después de la mentada de madre y de las otras palabrotas que uso el gobernador de Jalisco, cuatro personas presentaron quejas en su contra por ello ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos la cual seguramente prometió llegar hasta las últimas consecuencias, o sea, ningunas consecuencias.
Los diarios narran que el Cardenal Juan Sandoval Iñiguez celebraba las ocurrencias del gobernador con aplausos y sonrisas, si así fue, tanto peca el que mata la vaca como el que le detiene la pata. Todos merecemos respeto por parte de quienes nos gobiernan, más quienes tienen una representación como la del Cardenal. Desde cualquier punto de vista es totalmente reprobable la conducta de quien, además con aliento alcohólico, según testigos, insultara, pidiendo previamente perdón al Cardenal, a quienes no están de acuerdo con él.
Si dejamos pasar estos hechos sin hacer nada al respecto, si no se sanciona a quien dice haber sido elegido para hacer realidad sus promesas de campaña y para ello mienta madres y vocifera otros insultos, estaremos dando un mensaje a los jóvenes y a los niños de nuestro país para que ellos mismos usen palabras soeces sin el más mínimo respeto para quienes estén presentes. No nos sintamos sorprendidos de que muchos de los niños y jóvenes mexicanos e incluso adultos, no muestren respeto al hablar y se expresen de manera inapropiada, ello es fruto de los ejemplos que ven en su entorno familiar y social, sobre todo en el primero de ellos, el familiar.
Ante todo, como decía Alfonso Reyes en su Cartilla Moral para los Mexicanos, el hogar es la primera escuela. Si los padres, que son nuestros primeros y constantes maestros con su ejemplo, se portan o expresan indignamente ante nosotros, faltan a su deber en lugar de educarnos como les corresponde. El lenguaje soez es una falta de respeto, de modo que el respeto del hijo al padre no se da como fruto de la educación temprana, si primero no se complementa con el respeto del padre al hijo. La familia es una escuela de perfeccionamiento y la educación y el ejemplo brindados por los padres son una necesidad racional y natural de los hijos, para inspirarse en quienes ya les llevan la delantera. El uso del lenguaje apropiado, como muchas otras cosas es, a fin de cuentas, asunto de educación, asunto de familia.
Comarca lagunera, abril, 2008.
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