Regidores rechazaron la Cuenta Pública presentada en la última sesión de Cabildo.
La polémica continuó ayer entre el alcalde José Ángel Pérez y los regidores del PAN que junto a la bancada del PRI, votaron el pasado miércoles en contra de las cuentas públicas del primer cuatrimestre de 2008, porque aseguran no estar de acuerdo con la manera como se ejerce el gasto público.
Ahora el presidente municipal les pidió a los ediles inconformes “a que nos denuncien, si consideran que hacemos algo mal o que estamos robando, que nos denuncien, que nos metan a la cárcel”.
Y les dijo además a las regidoras Monserrat Martínez y Karina García que si tienen información de que se les quita el 5 por ciento de su sueldo a directores y jefes de departamento, que también lo denuncien, pero les aclaró que “no es para mi campaña, lo que puedan aportar voluntariamente es para el partido”.
Dijo que “todavía no inicio mi campaña para gobernador, yo soy alcalde y si a otros les tiemblan las corvas porque piensan que es dinero para mi campaña, no se asusten, todavía no, cuando la vean se van a asustar porque voy con todo”.
Asegura respecto a la inconformidad de sus compañeros panistas que él está tranquilo y no se preocupa, ya que: “de ninguna manera me excedo en los gastos de representación, ni del gasto público”.
José Ángel Pérez afirma que las erogaciones que ha realizado por motivo de cortesías relacionadas con el equipo de futbol Santos “que nos acaban de pasar a la final de futbol, bien valen la pena”.
Y ante los señalamientos directos de los regidores miembros de su mismo partido, en el sentido de que no se hace un buen uso del gasto público, explicó la compra de los 200 boletos de futbol en los que se gastaron 49 mil 400 pesos y los cuales se pagaron con recursos públicos.
Dijo que de esos 200 boletos 60 fueron cortesías para los invitados que vinieron de Monterrey al juego del domingo pasado, entre ellos, autoridades municipales encabezadas por el alcalde Adalberto Madero y empresarios, el resto se regaló a funcionarios. “No tengo la lista pero voy a revisar cómo estuvo”.
El alcalde también detalló el gasto de alrededor de 70 mil pesos en una comida que ofreció a esos invitados horas antes del partido, en el restaurante argentino El Rincón del Bife. Explicó que su anfitrionía obedece a que fue objeto del mismo nivel de atenciones cuando fue invitado junto con otros funcionarios de Torreón a Monterrey en el primero de los dos juegos entre los equipos mencionados.
“Nos invitaron también a un restaurante bueno a cenar y es del mismo nivel que el Bife. No les platico lo que cené porque se les va a antojar. Por lo tanto nosotros lo que quisimos fue darles el mismo nivel de atención”.
Al alcalde le interesa que le hagan una revisión de los gastos que realiza porque afirma que también va a comer al Pollo Loco.