Durante el primer semestre del año, el ahorro voluntario para el retiro aumentó 27.9 por ciento en términos nominales, al pasar de dos mil 651.2 millones de pesos, en diciembre de 2007, a tres mil 392.71 millones en junio pasado.
No obstante, las aportaciones voluntarias sólo representan 0.4 por ciento de los 824 mil 698 millones de pesos de los recursos de los trabajadores registrados en las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore) al sexto mes del año.
De acuerdo con cifras de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), en los últimos 12 meses concluidos en junio, el ahorro voluntario creció en 847.48 millones de pesos o 33.2 por ciento en términos nominales respecto a igual mes del año pasado.
Esta es la tasa de crecimiento más alta desde que inició el actual sistema de pensiones en 1997 y significó un importante incremento en términos anuales en los últimos meses, ya que venía de niveles de alrededor de 10 por ciento.
Ello pese a la volatilidad del mercado y a que de enero a junio de este año, las Afore reportaron un rendimiento negativo de 2.74 por ciento, siendo junio el mes con el peor desempeño.
La Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos para el Retiro (Amafore) señala que las aportaciones voluntarias constituyen una interesante oportunidad para el trabajador, ya que se pueden realizar depósitos sin un monto mínimo.
Asimismo, se tiene acceso a las tasas de rendimiento que recibe el ahorro obligatorio y cuentan con beneficios fiscales si se conservan hasta la edad de retiro, entre otros beneficios.
Por ello, considera que uno de los principales retos del sector es que los trabajadores incrementen su ahorro voluntario, a fin de que cuenten con mejores condiciones al momento de pensionarse.